«No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos» (Gálatas 6:9, RVR1960)
ESPIRITUAL
«Vosotros, pues, oraréis así: Padre nuestro, que estás en los cielos, santificado sea tu nombre…» (Mateo 6:9,10)
«Cuando ayunéis, no seáis austeros, como los hipócritas; porque demudan sus rostros para mostrar a los hombres que ayunan…» (Mateo 6:16–18).
La bendición de esperar es, como dice la Biblia: «Estad quietos, y conoced que yo soy Dios» ((Salmo 46:10, RVR1960)
Dios le proporcionó a Israel un libro para enseñarles a orar: Salmos. En él se expresan los sentimientos más profundos de sus autores.
«Entonces los apóstoles se juntaron con Jesús, y le contaron todo lo que habían hecho, y lo que habían enseñado…». (Marcos 6:30-32)
¿Quieres ser un líder de iglesia? Considera algunas cualidades espirituales definitorias que el libro de los Hechos enumera.
«Mirad, con diligencia, cómo andéis. No como necios, sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos» (Ef. 5:15-16)
Daniel y sus amigos mostraron la verdadera religión. Su carácter no era el producto de su formación académica, sino de su relación con Dios.
El Departamento de Gestión de la vida cristiana, tiene el reto de mantener despiertas nuestras mentes y abiertos nuestros corazones a Jesús.
Llevaron al Salvador lo más valioso que tenían. Fueron ejemplo. Oro, incienso y mirra son nuestra fe, amor, recursos, comunión y testimonio.
¿Cómo leer Salmos? El libro de Salmos debe ser leído teniendo en cuenta que es un libro peculiar en muchos aspectos.
Seamos fieles y diligentes alumnos de la escuela de Cristo. El Año Nuevo abre sus limpias páginas ante nosotros. ¿Qué escribiremos en ellas?
Cierra el año alabando a Jehová. Él merece nuestra adoración. Pronto volverá. Un año más ha pasado y ya falta uno menos para verlo volver.
Cuidar de la naturaleza, estar en contacto con la creación y contemplarla es un privilegio y una responsabilidad dada por Dios.
La misión de Dios es que la humanidad viva junto a él feliz y en armonía. Jesús hizo y sigue haciendo su parte. Colaboremos con esa misión.
Jesús es Emanuel, «Dios con nosotros», y no, no nació un 25 de diciembre, pero podemos recordar este notable acontecimiento.
Esta Navidad, prioricemos de forma especial a Jesús y compartámosle como regalo a los demás. Sin duda, Él es el mejor Regalo.
Seamos como Ester. Somos extranjeros en este mundo y tenemos que convivir con leyes que, en ocasiones, contradicen la Ley de Dios.
Arco iris… ¿Qué puede representar ese símbolo que aparece en el cielo, a partir de la perspectiva de las culturas antiguas?
Estar solo puede ser un estímulo para estar más cerca de Dios, crecer emocional y espiritualmente, y avanzar en el propósito de Dios.
Uno de los mayores regalos que podemos brindar a nuestros hijos, es la participación activa en nuestro ministerio.
Jesús veía a las multitudes «como ovejas que no tienen pastor» (Mateo 9:36). Sentía compasión por ellas, y veía su necesidad de ayuda.