El costo del descanso es el arrepentimiento, la restauración. La clave de nuestra relación con Jesús está en la confianza. Confiemos en Él.
ESPIRITUAL
Jugando a la espera. Seguir las instrucciones de Dios nos ayuda a evitar situaciones de conflicto. Él es nuestro guía y protector.
Las raíces del descontento. Al enfocar nuestros pensamientos en la preciosa promesa, las vicisitudes de esta vida pasan a un segundo plano.
Pídele a Dios sabiduría para volver a llevarte bien con esa persona y, si eso no es posible, dispón una separación pacífica.
Podemos escoger entre vivir sin descanso y rebeldes, o aprender a descansar en Cristo, obedientes y fieles. Ojalá seamos sabios eligiendo.
Todos formamos parte del árbol genealógico del amor de Dios. Estamos emparentados. Dale gracias a Dios por pertenecer a su familia.
Vivir en una sociedad 24-7, que trabaja veinticuatro horas al día siete días a la semana es un auténtico reto. ¿Podemos hallar descanso?
El Instituto de Investigación Bíblica de la Asociación General responde a preguntas sobre la marca de la bestia y los eventos finales.
¿La maternidad como medio de salvación? Entendamos el texto en su contexto. La salvación no requiere engendrar hijos. Solamente Dios salva.
La tierra será transformada. Agradece a Dios por la paz que disfrutaremos en la Tierra Nueva, y por todas sus bendiciones.
A medida que andamos con Jesús en esta vida, podemos estar llenos de su amor, satisfechos con su presencia. Es parte del Nuevo Pacto.
El resultado de la guerra entre Dios y Satanás ya está decidido. Jesús obtuvo la victoria cuando murió en la cruz para salvarnos.
Todo el pacto se basa en las seguras promesas de Dios. Cuando por la fe nos aferramos a ellas, y las reclamamos, transforman nuestra vida.
Descubre cuáles serán las dos actividades principales a las que nos dedicaremos durante los mil años, o milenio.
No podemos ver a nuestro Mediador con los ojos naturales, pero mediante la fe vemos a Cristo frente al propiciatorio.
Lo que vives en este mundo es menos de un segundo de la eternidad. Con Jesús te espera una nueva vida, eterna y perfecta, de felicidad.
Aunque este pacto fue hecho con Adán, y se renovó con Abraham, cuando Cristo lo ratificó fue llamado el nuevo pacto.
Dios legisló la esclavitud para humanizarla, mientras anunciaba la llegada de un jubileo final en el que la esclavitud llegaría a su fin.
Jesús nos defiende, Él es nuestro abogado. Sólo tenemos que aceptar su sacrificio en la cruz, reconociéndolo como nuestro Salvador personal.
El sábado es más que una mera porción de tiempo; es la promesa de una relación rica y significativa con Dios.
Para pertenecer a este reino de amor tengo que obedecer los diez mandamientos por amor a Dios (Juan 14:15) y a los demás.
Cuando hablamos del Pacto Eterno, hablamos de una relación perdurable en el tiempo. Para eso es necesario establecer normas y límites.
«Como creyentes, tenemos en nosotros la semilla de la vida eterna que se hará realidad en la segunda venida de Jesús» (W. Johnsson).
Si os entregáis a Cristo, el salvador, su carácter reemplazará al vuestro y seréis aceptados por Dios como si no hubierais pecado.