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Descarga estas maravillosas historias, en PDF, al final de la revista: Semana Oración Integrada 2020

Gema para memorizar: «Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas y con toda tu mente”; y, “ama a tu pró-jimo como a ti mismo» (Lucas 10:27, DHH).

Mamá, ¿podemos preparar comida para los niños de la calle que andan cerca de la iglesia? –preguntaron las gemelas Laura y Sara-.

—¡Gran idea, niñas! –exclamó la mamá–. ¿Pero cuánto dinero necesitamos para alimentarlos a todos?

—Bueno, quizá podemos pedir a los miembros de la iglesia que donen los ingredientes. Estamos seguras que ellos también querrán ayudar –dijeron las gemelas al unísono-.

—¿No es lo que Jesús dijo que deberíamos hacer? ¿Cuál es ese texto en el que Jesús dijo algo sobre ayudar a los demás?–preguntó Laura-.

—Sí, en Mateo 25 se registra que Jesús dijo que cuando ayudamos a alguien, damos comida a los pobres, visitamos y oramos por los que están en la cárcel, lo estamos haciendo para él. Jesús es nuestro mejor modelo de servir a otros –explicó papá-.

Durante los siguientes dos días, Laura y Sara estuvieron ocupadas haciendo llamadas por teléfono para pedir donaciones a los miembros de su iglesia. Les pidieron frutas y verduas para su proyecto especial.

—Señor Janu, ¿podría donar algunas verduras u otros alimentos para que nosotras los cocinemos y podamos alimentar a losniños de la calle? –explicaron las gemelas cuando llamaron al primer anciano de la congregación-.

—¡Es una idea excelente, niñas! Me alegra apoyar este proyecto. Le preguntaré a mi esposa si desea ayudaros para cocinar –sugirió el hombre-.

Cuando llegó el domingo, Laura y Sara, con ayuda de la mamá, la señora Janu y varios hombres y mujeres de la iglesia, prepararon ocho ollas grandes de sopa. Papá y algunos ancianos, ancianas, diáconos y diaconisas de la iglesia ayudaron a transportarlas al parque donde se encontraron con los niños de la calle. ¡Qué día tan ocupado fue ese!

—¡Gracias a Jesús, por su ayuda! ¡Hemos alimentado a ochenta niños hambrientos! –exclamaron  al terminar las mellizas con amplias sonrisas en el rostro–. ¡Queremos ser como Jesus!

PROFUNDIZA

  • Lee Mateo 25:31-41 y analiza por qué es difícil seguir el modelo de Jesús de servir a otr
  • Sobre la base de la parábola del buen samaritano (Luc. 10:25- 37), ¿cómo podemos llegar a ser samaritanos modernos?

APLÍCALO

  • Trabaja con tus padres o maes- tros de Escuela Sabática para identificar un p oyecto que podrías hacer para servir a tu comunidad, así como sirvió Jesús.
  • Encuentra a dos o tres amigos y participa de una caminata de oración en tu comunidad para orar por las diversas tiendas y las familias del vecindario.

Autora: Linda Mei Lin Koh, directora de Ministerios del Niño de la Asociación General de la Iglesia Adventista del Séptimo Día. 

Revista Adventista de España