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Lección 12 para el 22 de junio de 2024: LOS ACONTECIMIENTOS FINALES DE LA TIERRA.

El punto culminante que marcará el final de la historia es la predicación del Evangelio en todo el mundo (Mateo 24:14).

Esta predicación estará precedida por el derramamiento del Espíritu Santo, con el mismo poder que descendió en Pentecostés. Este acontecimiento es conocido como la «lluvia tardía».

¿Quiénes recibirán la lluvia tardía? Aquellos que hayan decidido ser fieles a Dios, obedeciendo Sus mandamientos, y alabándole de acuerdo con ellos. Estos serán marcados con el «sello del Dios vivo» (Apocalipsis 7:2).

  • Preparación para la crisis final:

    • Dirigidos por la Palabra.

      • En los momentos finales se le permitirá a Satanás realizar prodigios reales y plantear engaños tan sutiles que serán irrefutables (Apocalipsis 13:13-14; Mateo 24:24).
      • Solo un conocimiento cabal de la Biblia, con la ayuda del Espíritu Santo, nos permitirá permanecer firmes en la verdad (2ª de Pedro 1:19-21).
    • Sellados en las frentes.

      • El sello de Dios se identifica de tres maneras distintas:
        1. El Espíritu Santo. Con él son sellados los creyentes de todas las épocas (Efesios 4:30).
        2. El nombre, o carácter de Dios. Lo poseerán todos los que alcancen la victoria (Apocalipsis 14:1; 22:4).
        3. Una señal reconocible (Apocalipsis 9:4; Ezequiel 9:4).
      • Dios dejó su sello en uno de los 10 mandamientos, como señal distintiva de aquellos que le adoran (Ezequiel 20:20).

      • El sello, marca o señal puede recibirse de dos maneras distintas: en la frente o en la mano. Mientras que los fieles lo recibirán en sus frentes, los infieles lo recibirán en sus frentes o en sus manos (Apocalipsis 13:16). ¿Cuál es la diferencia?
        1. Frente: CONVICCIÓN INTELECTUAL. Creernos a aquel que adoramos
        2. Mano: INTERÉS (obtención de beneficios). Adoramos por temor a las consecuencias
      • Mientras que a Satanás no le importan los motivos por los que se le adore, Dios solo acepta la adoración sincera y cabal (Romanos 12:1).
    • Leales en la adoración.

      • Los que se niegan a recibir la marca de la bestia no pueden comprar ni vender, y son amenazados de muerte (Apocalipsis 13:15-17). Por otro lado, si la reciben, sufrirán las últimas plagas y la «muerte segunda», perdiendo la vida eterna (Apocalipsis 16:2; 14:9-11; 20:4, 13-15).
      • Si el sábado es la señal (marca) visible de los fieles, ¿no tendrá la misma naturaleza la marca de la bestia?
      • Dado que la Biblia no habla de ningún cambio en el día de adoración, aceptar el domingo como día de adoración es aceptar la autoridad de la Iglesia que realizo el cambio (identificada como 666).
      • ¿Qué autoridad, pues, aceptaremos? ¿La autoridad de una institución humana o la autoridad de Dios, manifestada claramente en Su Palabra?
  • Poder de lo alto:

    • La lluvia tardía.

      • El profeta Joel usa la lluvia como una metáfora para el derramamiento del Espíritu Santo (Joel 2:23, 28). Así lo aplicó Pedro en su discurso del día de Pentecostés (Hechos 2:14-17).
      • Al igual que la Iglesia comenzó con una lluvia del Espíritu Santo, la proclamación final del evangelio, la última cosecha, se producirá tras el derramamiento de la lluvia tardía: el Espíritu Santo derramado con poder sobre los creyentes de la última generación (Apocalipsis 18:1).
    • La predicación del Evangelio.

      • El mensaje del ángel de Apocalipsis 18:1 es el mismo que el mensaje del segundo ángel: Babilonia ha caído, y ha contaminado a todas las naciones (Apocalipsis 18:2-3; 14:8).
      • El Espíritu Santo descenderá con poder sobre los fieles «que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús» (Apocalipsis 14:12), y que ya están proclamando el evangelio, junto con la advertencia del inicio del juicio, y la invitación a adorar al Creador (Apocalipsis 14:6-7).
      • Ante estos mensajes, y gracias al poder de la lluvia tardía, la humanidad se verá confrontada a elegir entre dos posibilidades: aceptar el sello de Dios o la marca de la bestia (Apocalipsis 14:9-11).
      • Muchas voces proclamarán el último mensaje. Muchos decidirán ser fieles hasta el fin.

Para meditar:

«El descenso del Espíritu Santo sobre la iglesia es esperado como si se tratara de un asunto del futuro; pero es el privilegio de la iglesia tenerlo ahora mismo. Buscadlo, orad por él, creed en él. Debemos tenerlo, y el cielo está esperando concederlo». (Elena G. White, Eventos de los últimos días, pg. 161).

«Pero nadie sufrirá la ira de Dios antes que la verdad haya sido presentada a su espíritu y a su conciencia, y que la haya rechazado. Hay muchas personas que no han tenido jamás oportunidad de oír las verdades especiales para nuestros tiempos. La obligación de observar el cuarto mandamiento no les ha sido jamás presentada bajo su verdadera luz. Aquel que lee en todos los corazones y prueba todos los móviles no dejará que nadie que desee conocer la verdad sea engañado en cuanto al resultado final de la controversia. El decreto no será impuesto estando el pueblo a ciegas. Cada cual tendrá la luz necesaria para tomar una resolución consciente». Elena G. White, El conflicto de los siglos, pg. 591).

Autor: Sergio Fustero, de la Iglesia Adventista del 7º Día en Castellón. Responsable, junto con su esposa Eunice Laveda, de la web de recursos para la E.S. Fustero.es
Imagen: Librito oficial de Escuela Sabática

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Revista Adventista de España