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“Cuando estoy cantando siento que estoy hablando con Dios”

El pasado día 13 abril tuvimos la oportunidad de disfrutar de la voz, como solista, de Daniel Ferrás, conocido intérprete y compositor de música cristiana. El concierto se efectúo en la Iglesia Adventista de Lleida y aprovechamos este evento para conocerlo un poco más.

Daniel Ferrás, conocido en el entorno adventista por haber sido un componente del grupo Forgiven, nació el 20 de mayo de 1969 en Los Ángeles (California). Hijo de padre cubano y madre colombiana, se educa en una ambiente cristiano y hereda de su padre el talento para la música. A la edad de cuatro años, canta por primera vez en la iglesia y posteriormente junto a su hermano, a su hermana y a sus primos interpretan música religiosa.

A lo largo de su trayectoria musical forma parte numerosos grupos. En 1983, a los 14 años, se une al grupo musical Praise, Praise, perteneciente a una Iglesia local de Los Ángeles, con los que graba varios álbumes en cintas magnéticas. En 1991, viaja a Australia para unirse y grabar un álbum con el conocido grupo, Endless Praise. Después de trece meses, Daniel regresa a los Estados Unidos para efectuar los estudios de Fisioterapia en la Universidad de Loma Linda. Teniendo el continuo deseo de alabar a Dios a través del canto, en 1993, se une al grupo Heritage Singers-Spanish Edition.

En 1995 pasa a formar parte del grupo llamado Saving Grace, que posteriormente, en 1997, se transformará en el grupo a lo que hoy conocemos como Forgiven, con los que producirá siete CDs y tres DVDs en español. En marzo de 2011, deja el grupo para continuar su carrera en solitario. Coescribe dos canciones “Nueva Criatura” y “Quiero Verte Ya” para su primer álbum “Mi Universo” que lanza como solista. Actualmente, está trabajando en su segundo proyecto como solista producido en inglés y en español.

El sueño de Daniel es poder dar a conocer el amor a Dios a través del canto. Su ministerio de música le ha dado la oportunidad y el privilegio de viajar no sólo en los Estados Unidos, sino también a lugares como Colombia, Venezuela, México, República Dominicana, Guatemala y Argentina. Una de las visitas que le dejaron huella fue en Kodiak, Alaska, donde experimentó realmente lo que significa compartir el amor de Dios por medio de la música. El año pasado contrajo matrimonio con Silvana. Actualmente están efectuando una gira dando conciertos por toda Europa.

Durante los dos días que visitó nuestra iglesia, todos los niños querían permanecer a su lado, lo que nos recordaba el cuento del Flautista de Hamelin. El gran cariño que mostró hacia ellos, hizo que ninguno quedase impasible ante su voz y su presencia. Así pues, cuando los invitó a cantar junto a él durante el concierto todos los hicieron gustosamente. Antes de su partida los niños esperaban ansiosos para que les dedicara su CD, demostrándonos que una buena estrategia para lograr que los niños amen la música es la de sentirse aceptados y amados por quien la interpreta.

¿Cómo te presentarías a las personas que no te conocen?

Me gustaría que me conocieran como un discípulo de Jesús. Como alguien que ama a Jesús y que es un servidor, alguien que quiere alabarlo, que quiere amar a Dios y a su prójimo. Como un cantante a quien le gusta la naturaleza. Que ama a su familia. Así me gustaría que me conocieran.

La mayoría de personas te conocen por tu voz y como miembro del grupo Forgiven. ¿Te dedicas profesionalmente a la música?

Sí, actualmente puedo decir que me dedico a la música como cantante a tiempo completo. Este ha sido mi sueño durante muchos, muchos años. He cantado durante casi toda mi vida pero solo a tiempo parcial, combinando la música con mi trabajo de fisioterapeuta, pero desde que me casé con Silvana hemos iniciado este ministerio a tiempo completo. Y ha sido la realización del sueño que siempre he tenido.

¿Qué significa la música para ti?

Es la conexión más grande que tengo con el Señor, con mi padre celestial. Para mi es la comunicación más perfecta. Tenemos la palabra, tenemos la oración, tenemos la naturaleza y por medio de esas formas nos podemos comunicar con Dios y sentir su presencia. Cuando estoy cantando siento que estoy hablando con Dios.

¿Actualmente crees que se utiliza suficientemente la música para acercar a las personas a Jesús?

Depende de la iglesia y del país. Algunos países, por ejemplo Brasil, usan la música de forma muy eficiente para evangelizar y para animar. Como iglesia en general nos falta mucho. Otras iglesias, otras denominaciones están mucho más avanzadas en el uso de la música como alabanza y como instrumento para predicar el evangelio que nosotros.

¿Qué opinas de la música que utilizamos habitualmente en nuestras iglesias? ¿Crees que cumple realmente esa función evangelizadora?

Yo creo que falta mucho dependiendo del país en el que nos situemos. Hay algunas culturas que tienen la música en la sangre, por ejemplo la cultura afroamericana. Esta cultura utiliza la música mucho mejor para adorar a Dios, tanto individualmente como en comunidad. Usan la música de forma habitual en su vida. En muchas iglesias falta esto. Incluso en los Estados Unidos en muchas iglesias latinas y americanas falta el uso de la música como elemento evangelizador. Debemos mirar a esos países como Brasil para aprender de lo que ellos están haciendo y usar su ejemplo.

¿Cómo debería evolucionar la música cristiana para que pudiera llegar a los jóvenes?

He estado hablando con un hermano después del culto de cómo se puede lograr esto. Cómo podemos educar a las nuevas generaciones para lograr que haya mayor y mejor uso de la música como alabanza a Dios. Hemos llegado a la conclusión de que el cambio debe producirse a través de la educación musical de los niños. He visitado iglesias rumanas y ellos le dan mucha importancia a la música y a sus niños desde edades muy tempranas les enseñan a tocar todo tipo de instrumentos: el piano, la guitarra, … y esto es la clave para que los niños se acostumbren a utilizar la música, y usen esos talentos como una forma de alabar a Dios y animar a sus hermanos. Y poco a poco dando el protagonismo a los jóvenes podemos cambiar el uso de la música.

Como bien has dicho, cada país utiliza la música para alabar al Señor de forma diferente. ¿Qué opinión te merece el papel que tiene la música en las iglesias españolas?

En España se tiene un concepto muy cerrado del uso de la música como elemento evangelizador. Parece como si usar la música para evangelizar fuera algo difícil. Y creo que la música sería un elemento clave cuando una persona visita la iglesia. Si escucha música que eleva, que inspira, que causa cierta emoción, yo creo que ayudaría mucho a las personas que nos visitan. Siempre que invitamos a alguien queremos que el mensaje les llegue al corazón así pues deberíamos utilizar la música para hacer crecer a las personas espiritualmente.

En el Antiguo Testamento leemos que se utilizaba la música para facilitar el aprendizaje de textos, para orar. Se utilizaban instrumentos musicales que hoy siguen siendo “tabú” en la música religiosa de nuestras iglesias

¿Qué opinión te merece ese hecho, tenemos todavía muchos “tabúes” a la hora de utilizar la música religiosa? ¿Debería cambiar esa situación?

Sí, yo creo que sí. El pueblo de Israel tenía un concepto diferente de la música al que tenemos hoy en día. Tenía una música que alegraba, que inspiraba, que motivaba y deberíamos mirar hacia atrás, y ver que podríamos aprender del uso que ellos daban a la música. Del uso de los cantos, de la forma como aprendían las escrituras a través de la música. Los Salmos son música. Sería muy bonito poder volver a hacer música para pode cantarlos otra vez.

¿Quieres añadir alguna reflexión personal a esta entrevista sobre algo que no te haya preguntado?

Yo crecí en un hogar típico latino, donde mis padres querían lo mejor para nosotros, y nos inculcaron la idea de que debíamos estudiar algo que nos posibilitara un trabajo seguro, como estudiar medicina. Pensaban que aprender música era algo bonito, pero no como trabajo. Esa mentalidad la sigue teniendo mucha gente todavía y creo que es un error. Si los padres ven que sus hijos tienen un talento para la música deben potenciar ese talento porque es una manera de evangelizar muy importante. Deberían apoyarles en su vocación y permitir su formación, sacrificarse para que sus hijos aprendan a tocar un instrumento, para que aprendan a cantar. Incluso deberían enseñarles a ser buenos oradores, a que aprendieran a hablar en público. Debemos educar a nuestros hijos a que sean unos buenos propagadores del evangelio.

Todos los que pudimos disfrutar del Concierto de Daniel Ferrás descubrimos una nueva forma de evangelizar por medio de la música. Una forma original de hacer conciertos implicando al público, especialmente a los niños. Pudimos descubrir la música hecha oración y comunicarnos con Dios a través de ella.

Imagen: Dani Ferrás cantando con niños en la Iglesia Adventista de Lleida.

Hay un comentario

  • RICARDO GODINEZ dice:

    HERMOSA ENTREVISTA, QUE EL SEÑOR LE SIGA BENDICIENDO EN SU MINISTERIO COMO HASTA AHORA, LE PROSPERE CON ESE TALENTO GRANDIOSO DE SU VOZ Y DANDO FRUTOS LLEVANDO ALMAS A CRISTO. BENDICIONES

Revista Adventista de España