Día 5 de los Diez días de oración 2025: Pero tú cuando ores… SANTIFICADO SEA TU NOMBRE.
Descarga la revista completa aquí: REVISTA 10 DÍAS DE ORACIÓN 2025
Himno lema, y pista con letra, AQUÍ
Más información sobre los Diez días de oración 2025 AQUÍ
Enlace al Zoom para las reuniones diarias, a las 6 de la mañana, AQUÍ
DÍA 5 – SANTIFICADO SEA TU NOMBRE
«Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.» (Mateo 5:16, RVR 1960).
Somos una carta abierta
Una vez, los miembros de una iglesia, junto con el pastor, intentaron invitar a los vecinos a algunos eventos. Varios se negaron. El pastor preguntó a algunas familias que conocía por qué no querían venir. En palabras diferentes, todos dijeron: «Si el señor… es miembro allí, preferimos no asistir. No es amable ni cariñoso. No tiene respeto ni sentido de la vergüenza. Hace trampas, maltrata a sus mascotas y siempre está enfadado y maleducado». La mayoría de los miembros de la iglesia entendieron sus razones.
El Padre nuestro comienza con las palabras: «Padre nuestro que estás en los cielos». Dios no sólo es el Dios del Universo, sino que también tiene una relación estrecha e íntima con nosotros. Luego dice: «Santificado sea Tu nombre». La palabra griega no es hagios—que significa ‘santo, sagrado, digno’—sino hagiazo—que significa ‘santificar’. ¿Cómo podemos santificar o hacer santo a Dios cuando Él es santo?
Pablo dice que somos una carta abierta leída por todo el mundo (2ª de Corintios 3:2). En 1ª de Corintios 4:9 escribe: «Porque según pienso, Dios nos ha exhibido a nosotros los apóstoles como postreros, como a sentenciados a muerte; pues hemos llegado a ser espectáculo al mundo, a los ángeles y a los hombres» (RVR 1960).
La gente no ve a Dios, nos ve a nosotros. Nuestro comportamiento diario puede glorificar a Dios y honrarlo, o puede deshonrar Su nombre y representar mal a la iglesia, afectando negativamente su trabajo (Mateo 5:13–16 RVR1960).
Entra en la presencia de Dios con alabanzas y luego reconócelo como tu Padre amoroso. En vez de enfocarte en ti y en tus necesidades, primero enfócate en Dios, Su nombre y Su honor.
Dios quiere que busquemos aquellas cosas que honrarán Su nombre. En ningún caso debemos glorificarnos a nosotros mismos; debemos buscar a Dios para obtener gracia y bendiciones espirituales, a fin de que podamos glorificar Su nombre en nuestros caracteres. Dios es glorificado, Su nombre es santificado, cuando Sus hijos dan en sus vidas una representación del carácter de Cristo. (Elena de White, Manuscrito 34, 1903, par. 15).
Ora algo como esto: «Padre, ayúdame a honrarte en todo lo que haga hoy. Ayúdame a representarte adecuadamente y a llevar tu Nombre para que cuando la gente me vea te alabe. Permíteme comportarme de una manera que permita a la gente ver el carácter de Jesús a través de cada una de mis acciones y palabras.»
Además, en tu oración busca solo cosas que honren y sirvan a Dios. 1 Juan 5:14 dice: «Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye» (RVR 1960).
Debemos orar en el Nombre de Jesús, pero eso significa más que simplemente decir «en Tu Nombre». En los tiempos bíblicos, un nombre representaba el carácter. Orar en el nombre de Jesús es orar dentro de Su voluntad, pedir las cosas que lo representarían a Él y a Su carácter. Santiago 4:3 dice: «Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites» (RVR1960). «Pero orar en nombre de Cristo significa mucho. Significa que hemos de aceptar su carácter, manifestar su espíritu y realizar sus obras» (Elena de White, El Deseado de todas las gentes, página 621,3).
Jesús prometió responder a nuestras oraciones si pedimos en Su Nombre, dentro de Su voluntad, y por algo que glorifique y honre a Dios (Juan 14:13, 14; 1ª de Juan 5:14).
Y cuando Dios responda, asegúrate de alabarle y honrarle. No debemos atribuirnos ningún mérito. Satanás trata de tomar la gloria de Dios para sí mismo. En humildad, agradece y glorifica a Dios a través de tus palabras, acciones y oraciones.
Cuando nos quejamos damos un mensaje equivocado sobre nuestro Dios. En cierto modo, decimos que Dios no es bueno, que no le importa, que no cumple sus promesas. Alégrate siempre (1ª de Tesalonicenses 5:16; Filipenses 4:4). Ora, habla y comporta de una manera que honre a Dios. ¿Cómo puedes inspirar fe cuando dudas? ¿Cómo puedes pedir a los demás que alaben a Dios cuando te quejas?
Nuestra oración de corazón debería ser: «Padre mío celestial y amoroso, ayúdame hoy a hablar y actuar de una manera que te represente adecuadamente ante los demás. Dame solo aquellas cosas que te honren, y ayúdame a usarlas de manera que te sirvan. Permíteme glorificar Tu nombre hoy».
Oremos juntos
Tiempo de oración (30 – 45 Minutos)
Todos los grupos de oración tienen diferentes maneras de orar juntos. Le animamos a que dedique los próximos 30-45 minutos a orar unidos, de la manera que el Espíritu Santo les guíe. Animamos a orar en frases cortas (1-3 frases). Esto permite que más personas oren varias veces. A continuación, se ofrecen algunos ejemplos de oraciones a través de las Escrituras basadas en el tema. También puede orar por otros pasajes e incluir otros temas en su tiempo de oración. Vea la Guía del líder y las Peticiones de oración de la Iglesia mundial para ideas para orar, en la revista de arriba).
Oración a través de la Palabra de Dios – Mateo 5:16
«Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.»
«Deja tu luz brillar»
Señor, Tú eres la Fuente de toda luz. Brilla a través de nosotros para que otros puedan ver la belleza de Tu carácter. Ayúdanos a brillar fuerte y audazmente para que otros sean atraídos a Tu reino a través de nuestro amor.
«Para que vean tus buenas obras»
Dios, a veces olvidamos que los demás observan todo lo que hacemos. Ayúdales a ver amor, no odio en nuestras vidas. Ayúdales a ver generosidad, no egoísmo. Trabaja en nuestras vidas para bendecir a nuestros hijos, a nuestros vecinos e incluso a nuestros enemigos.
«Y glorifica a tu Padre que está en los cielos»
Dios, Tú debes aumentar y nosotros disminuir. Humíllanos y ayuda a nuestro prójimo a vislumbrar Tu poder y compasión en nuestras acciones de amor.
Más sugerencias de oración
Agradecimiento y alabanza: Dar gracias por bendiciones específicas y alabar a Dios por su bondad.
Confesión: Tómate unos minutos para confesarte en privado y dar gracias a Dios por su perdón.
Guía: Pide a Dios que te conceda sabiduría para los retos y decisiones actuales.
Nuestra Iglesia: Orar por las necesidades regionales y mundiales de la Iglesia (véase la hoja separada con los pedidos en la revista de arriba).
Pedidos locales: Orar por las necesidades actuales de los miembros de la iglesia, familiares y vecinos.
Escucha y responde: Dedicar tiempo a escuchar la voz de Dios y responder con alabanzas o cantos.
Sugerencias de alabanzas
Himnario Adventista: Señor, mi Dios (#393); Alma bendice al Señor (#11); Alabadle! (#141)
Otras alabanzas: Más de Jesús; Digno eres, oh, Jesús; La tierna voz del Salvador
Autor: Pavel Goia, pastor ordenado, orador público, editor y autor de numerosos artículos y del libro «En Espíritu y Poder» que fue el libro texto de los 40 Días del crecimiento espiritual del año 2023 en nuestra Unión Española. En la actualidad, Pavel es asociado de la Secretaría Ministerial de la Asociación General y redactor jefe de la revista Ministerio.