El segundo versículo del libro de Proverbios señala su propósito: “Para aprender sabiduría” (Proverbios 1:2 RV95). El libro de Proverbios ha sido fuente de inspiración para millones de personas a lo largo de los siglos.
¿Cuál es el propósito del texto? ¿Qué significa para hoy? Estas son algunas preguntas que debemos hacernos al comenzar a estudiarlo. Cómo toda la literatura sapiencial el libro pretende enseñar a vivir.
Fue creado para ser aprendido de memoria. Así que al comenzar quiero darte un desafío: Memoriza el versículo de cada día. Anótalo y ponlo en algún lugar visible donde lo puedas ver a lo largo del día. Así esas palabras de vida guiarán tu vida.
El propósito expreso del libro es enseñar sabiduría. No es simplemente transmitir buenos consejos.
La sabiduría solamente la otorga Dios
Solemos creer que personas que han obtenido títulos universitarios o han logrado grandes éxitos empresariales, son personas sabias. Pero eso no es cierto. Cuando la Biblia está pensando en la sabiduría se refiere a un don que sólo otorga Dios a aquellos que deciden entregar plenamente su vida al Señor.
No es lo mismo ser inteligente que sabio. Hay personas con un doctorado, o individuos muy respetados por los logros laborales que han obtenido, pero eso no significa que sean sabios. Es posible ser inteligente, y paradojalmente, a la vez, insensato. Aunque sea difícil de creer es más fácil ser necio cuando se es inteligente puesto que hay mayor confianza en uno mismo.
La persona sabia aprende a desconfiar de su inteligencia y a confiar en la sabiduría de Dios. El necio, sólo confía en sí mismo.
La sabiduría no tiene que ver con genética, sino con la actitud que asumimos frente a nosotros mismos y a las capacidades que tenemos.
El libro de Proverbios, pretende hacernos sabios para vivir. Quiere guiarnos para que entendamos la necesidad de depender de la única fuente de sabiduría perfecta y absoluta que es Dios. Sólo en su sabiduría seremos sabios.
En muchos aspectos este libro supone un desafío, el más grande de todos, admitir que necesitamos aprender, cuestión que nunca ha sido fácil para ningún ser humano.
El Dr. Miguel Ángel Núñez. Pastor adventista ordenado. Doctor en Teología Sistemática; Licenciado en Filosofía y Educación; Orientador familiar.