La Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el pasado año, 2016, como “Año internacional de las legumbres” justo después de la declaración de la OMS, de octubre del año anterior, que advertía al mundo del efecto cancerígeno de la charcutería y de la carne roja. Cuando la gente se preguntaba “si no comemos carne, ¿qué comeremos?”, la ONU ofreció la respuesta correcta: Legumbres.
En pleno 2017 no hay que comer más soja, lentejas, garbanzos y guisantes solamente porque el consumo de carne resulta dañino, sino por muchas otras razones como las que se exponen a continuación.
Beneficios de las legumbres para la salud
- Fuente de proteínas vegetales de alta calidad, conteniendo todos los aminoácidos, esenciales y no esenciales. Es cierto que las proteínas de la mayor parte de las legumbres tienen una proporción ligeramente menor que la ideal del aminoácido esencial metionina. Esto no supone ningún inconveniente, pues los cereales contienen una proporción de metionina superior a la necesaria, de forma que al combinar legumbres con cereales, como lentejas con arroz, garbanzos con avena o judías (frijoles) con maíz, se obtienen todos los aminoácidos en la proporción idónea para producir proteínas completas. Hay que señalar que la soja, la “superlegumbre” contiene una proporción idónea de metionina y de los demás aminoácidos esenciales para niños y adultos (no para lactantes).
- Alto contenido en hierro y en cinc, dos minerales muy importantes para el crecimiento.
- Buena fuente de fibra vegetal, lo que contribuye a evitar el estreñimiento (constipación) y a tener una flora bacteriana intestinal sana. al producción de gas puede minimizarse remojando bien las legumbres y eliminando la piel que las recubre.
- Fuente de isoflavonas, fitoestrógenos protectores contra el cáncer de mama y de próstata.
- Ausencia de colesterol y de gluten.
- Bajas en grasas.
- Índice glucémico bajo, lo que las hace muy recomendables en caso de diabetes, síndrome metabólico y obesidad.
Beneficios de las legumbres sobre el medio ambiente
Las plantas de la familia de las leguminosas, cuyas semillas son las legumbres, resultan muy beneficiosas para el medio ambiente, por varias razones:
- Fertilizan el suelo de forma natural, gracias a unas bacterias especiales que crecen en sus raíces encargadas de asimilar el nitrógeno del aire, necesario para formar proteínas. De esta forma reducen la demanda de fertilizantes químicos.
- Precisan poca agua. Obtener 1 kg de carne requiere 13.000 litros de agua, mientras que cosechar 1 kg de legumbres solamente requiere 50 litros.
- Pueden conservarse durante meses sin necesidad de refrigeración y sin perder su valor nutritivo.
Conclusión
Los creyentes honramos al Creador con nuestra alimentación, pero también cuidando y respetando el medio ambiente. Comer legumbres en lugar de carne beneficia también al planeta.
Miles de años antes de que la ONU recomendara el consumo de legumbres, nuestro Padre celestial había dicho a sus primeras criaturas: “Mirad, os he dado toda planta que da semilla…” (Génesis 1: 29) Podemos deducir que esta orden incluye las leguminosas, plantas herbáceas con semillas, así como los cereales y otras plantas con semillas.
Y cuando Dios mismo tuvo que prescribir la receta para elaborar un pan nutritivo con el que el profeta Ezequiel debía resistir el sitio de Jerusalén, incluyó ingredientes como las habas y las lentejas, además de otras semillas.
Las legumbres son una alternativa saludable a la carne, tal como la ONU recomienda ahora. La Biblia ya lo había dicho.
Además, se pueden elaborar deliciosas recetas con ellas.
Dr Pamplona Roger. Responsable del Ministerio de la Salud de la Iglesia Adventista del Séptimo Día de España
Foto: Gaelle Marcel en Unsplash