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Togo es el país de origen de su madre, una vez fue conocido como la perla de África del oeste, un lugar donde un día de trabajo en el mercado era seguido por una vida tranquila en el pueblo.

Su madre nunca había viajado lejos de su hermosa Togo, con las playas tranquilas y con familiares y amigos a poca distancia; su madre nunca había sentido curiosidad por cualquier otro lugar en la tierra.

Pero ahora su madre estaba solo en su recuerdo. Los derechos humanos y los disturbios políticos de los años 90 habían truncando la vida de su madre – simplemente era una mujer que estaba en el lugar equivocado en el momento equivocado. Y ahora ella tenía que cuidar de sus hermanos y de sus propios hijos.

Sus dos hijos menores, Kossi y Sabine, asisten a la escuela. Está agradecida por que ellos están viendo un nuevo Togo.

Togo está siendo reconstruido, Togo se está convirtiendo en un país con esperanza, un país que está transformando en futuro los sueños de su difunta madre.

ADRA está presente en Togo desarrollando proyectos de cooperación y ayudando a que Kossi y Sabine crezcan con más garantías de futuro. Ayúdanos a ayudarles.

Revista Adventista de España