Dios existe, es real para mi. Sin embargo puede no serlo para el otro. Debo aprender que la mejor manera de amar a los demás (imperativo cristiano) es aprender a respetar. Porque, al final, la mejor manera de hablar a los demás de Dios, realmente, es viviéndolo. Los argumentos pueden rebatirse, pero una vida consagrada no. Un verdadero cristiano no toma tanto tiempo en discutir sobre Dios como en ser transformado por Él. Por tanto, un verdadero cristiano no falta al respeto, impone o se burla. Un verdadero cristiano vive buscando reflejar el carácter, y el amor, de Cristo.
Murilo Riveiro. Youtuber cristiano adventista.