Día 8 de los Diez días de oración 2025: Pero tú cuando ores… DANOS HOY EL PAN NUESTRO DE CADA DÍA.
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DÍA 8 – DANOS HOY EL PAN NUESTRO DE CADA DÍA
«No nos cansemos, pues, de hacer el bien, porque a su tiempo cosecharemos, si no desmayamos. Por lo tanto, mientras tengamos oportunidad, hagamos el bien a todos, y en especial a los de la familia de la fe» (Gálatas 6:9, 10, NIV).
Dios proveerá
Un día dediqué algo de tiempo a hacer cuentas. Después de apartar nuestro diezmo y un pequeño porcentaje para las misiones y los necesitados, pagué todas las cuentas, aparté algo para la matrícula de la escuela de nuestros hijos y me quedó una pequeña porción para el resto del mes para comida y otros gastos. Me subí al carro para llevar el dinero de la matrícula a la escuela y me fui. Llovía a cántaros.
Justo antes de entrar en la entrada de la escuela, vi a una joven visiblemente angustiada. Detuve el coche y me di cuenta de que era una joven a la que acababa de bautizar hacía unos meses. Estaba llorando.
–¿Cuál es el problema? –pregunté.
Finalmente, me contó que ella, junto con muchos otros, había perdido su trabajo cuando cerró una fábrica cercana. Luego, ella y sus dos hijos pequeños fueron desalojados de su apartamento porque no podían pagar el alquiler. Y ahora ya no tenían comida.
La llevé a un supermercado y llené el carro de comida, pagándola con parte de la matrícula. Al llevarla de vuelta a la escuela, llamé al propietario del departamento y a duras penas logré negociar un acuerdo por el que yo utilizaba el dinero sobrante de la matrícula para pagar la mitad de lo que ella debía, mientras que el propietario perdonaba la otra mitad. Llamé a los miembros de la junta de la iglesia y pagaron el recibo de la luz.
Además, le dije:
–Cuando te recuperes, ayuda a otra persona necesitada.
Estaba tan agradecida.
Dios se preocupa por nosotros más de lo que nosotros nos preocupamos por nuestros propios hijos. Él promete que nuestro pan será suplido (Isa. 33:16). Pero fíjate en la palabra «nuestro» en el versículo: «Danos hoy nuestro pan de cada día». Jesús da a entender claramente que no sólo debemos pedir para nosotros, sino también para los que nos rodean.
De hecho, la Biblia es clara al decir que debemos amar a los demás tanto como a nosotros mismos (Marcos 12:31), y que debemos orar por los demás (Santiago 5:16). «Sobrelleven los unos las cargas de los otros y de esta manera cumplirán la ley de Cristo» (Gálatas 6:2, RVR1960). Así lo hicieron los discípulos del primer siglo. Eran uno en todo lo que hacían (Hechos 4:32).
«Nuestras oraciones no han de consistir en peticiones egoístas, meramente para nuestro propio beneficio. Hemos de pedir para poder dar. El principio de la vida de Cristo debe ser el principio de nuestra vida… Debemos pedir bendiciones a Dios para poder comunicarlas a los demás. La capacidad de recibir es preservada únicamente impartiendo. No podemos continuar recibiendo tesoros celestiales sin comunicarlos a aquellos que nos rodean» (Elena de White, Palabras de vida del Gran Maestro, página 108).
Nótese que en el Padre Nuestro no se habla de pan para mañana, sino sólo para hoy. Israel sólo podía recoger maná para un día cada vez (Éxodo 16:4). Dios no quiere que te preocupes por el mañana (Mateo 6:34). Pide para hoy. Pide para compartir. Busca bendecir.
Antes de que los seguidores de Cristo prediquen, deben demostrar su amor a Dios, siendo una bendición para quienes los rodean.
En el juicio, Jesús no te preguntará si fuiste a la iglesia o hiciste otras cosas buenas, aunque no debemos faltar a nuestras asambleas (Hebreos 10:25). Él dirá: «Estaba desnudo, hambriento y sediento. La forma en que amasteis a los que os rodeaban muestra la forma real en que me amasteis a Mí» (ver Mateo 25:31-45).
Dios te llama a orar por tu prójimo, amar a tu prójimo y ser una bendición para todos los que te rodean.
Oremos juntos
Tiempo de oración (30 – 45 Minutos)
Todos los grupos de oración tienen diferentes maneras de orar juntos. Le animamos a que dedique los próximos 30-45 minutos a orar unidos, de la manera que el Espíritu Santo les guíe. Animamos a orar en frases cortas (1-3 frases). Esto permite que más personas oren varias veces.
A continuación, se ofrecen algunos ejemplos de oraciones a través de las Escrituras basadas en el tema. También puede orar por otros pasajes e incluir otros temas en su tiempo de oración. Vea la Guía del Líder y las Peticiones de Oración de la Iglesia Mundial para ideas para orar.
Oración a través de la Palabra de Dios – Gálatas 6:9, 10
«No nos cansemos de hacer el bien, porque a su debido tiempo recogeremos la cosecha si no nos damos por vencidos. Por tanto, según tengamos oportunidad, hagamos el bien a todos los hombres, especialmente a los que pertenecen a la familia de los creyentes».
«No nos cansemos de hacer el bien»
Padre, a veces el ministerio nos deja exhaustos. Nos centramos demasiado en los planes y los resultados y olvidamos que Tú eres la Fuente de toda fuerza. Por favor, vuelve nuestros ojos hacia Ti. Aviva nuestros espíritus y llénanos de tu amor inagotable por un mundo necesitado.
«Recogeremos la cosecha si no nos rendimos»
Señor, gracias por esta promesa de que se acerca el día de la cosecha. Haz que nuestras manos sean fieles mientras plantamos y regamos las semillas de la fe en los demás. ¡Los resultados dependen de Ti!
«Hagamos el bien a todos»
Dios, danos Tus ojos para ver oportunidades de servicio. Muéstranos cómo podemos demostrar amor a nuestros hijos, a nuestros cónyuges, a nuestros vecinos, a los miembros de la iglesia, y a nuestros compañeros de trabajo. ¡Estamos tan contentos de ser parte de la familia de Dios!
Más sugerencias de oración
Agradecimiento y alabanza: Dar gracias por bendiciones específicas y alabar a Dios por su bondad.
Confesión: Tómate unos minutos para confesarte en privado y dar gracias a Dios por su perdón.
Guía: Pide a Dios que te conceda sabiduría para los retos y decisiones actuales.
Sugerencias de alabanzas
Himnario Adventista: A los perdidos y extraviados (#178); Como la buena tierra (#246); En la Montaña podrá no ser (#422)
Otras alabanzas: Bajo sus alas; Jesús me guía; Yo temprano busco a Cristo.
Autor: Pavel Goia, pastor ordenado, orador público, editor y autor de numerosos artículos y del libro «En Espíritu y Poder» que fue el libro texto de los 40 Días del crecimiento espiritual del año 2023 en nuestra Unión Española. En la actualidad, Pavel es asociado de la Secretaría Ministerial de la Asociación General y redactor jefe de la revista Ministerio.
