Skip to main content

El Departamento de Ministerio personal te invita a seguir disfrutando de estos 10 días de oración que cambiarán tu vida. 10 días que comenzaron el 9 de enero, y que culminarán el sábado 19 con una jornada especial. Estos 10 días de oración te llevarán a una experiencia más profunda con Dios. 

«Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; y salva a los contritos de espíritu» (Sal. 34: 18).

Historia para reflexionar

Mi hermano menor, Frank, me dio la noticia de que Danny, nuestro hermano mayor, alcohólico y drogadicto, había muerto por sobredosis.

Danny solía hacer amigos con facilidad. Pero, al empezar en el instituto, sus amigos eran los que se iban de juerga, bebían alcohol y experimentaban con drogas. No pasó mucho tiempo hasta que Danny se convirtió en alcohólico y drogadicto. Finalmente mi hermano se vino a vivir con mi marido y conmigo por un tiempo.

Mientras estuvo en nuestra casa, Danny mostró interés en los asuntos espirituales. Su vida estaba tomando un nuevo rumbo y, creyendo que ya había recuperado la estabilidad, regresó a su casa y pronto ya estaba de vuelta con sus viejos amigos y en las drogas.

Sentí dolor por Danny. Presenciar su lucha con las adicciones fue devastador para nuestra familia. Muchas veces se aprovechó de nuestros padres, robándoles para financiar su dependencia y mintiendo para encubrirla. Ellos no pudieron permitirle vivir en casa, así que se convirtió en una persona sin hogar. A mi madre le partía el corazón pensar en su hijo durmiendo al raso en invierno, comiendo en refugios –si es que comía–, vagando por las calles en busca de más drogas. Ella le dio muchas «segundas oportunidades», pero él nunca cambiaba. Murió solo. Qué harta estoy de este mundo y de cómo manipula Satanás a quienes son débiles y están separados de Cristo. Nunca fue el plan de Dios que la humanidad pasara por la vida sufriendo dolor y soledad, esclavizada por Satanás.

A menudo me pregunto si Danny creía que Dios le amaba. Me pregunto qué surcó por su mente en los últimos instantes de su vida. ¿Clamó a Dios? ¿Será salvo? Nunca conoceré la respuesta en esta vida, pero estoy segura de que nuestro Padre Celestial tenía su mano sobre Danny desde el momento en que nació. Sé que el amor de Dios fue su compañero constante, siempre tratando de atraerlo con su misericordia, y ofreciéndole la salvación.

Acciones

  • Alabanza
  • Confesión y reclamo de la victoria sobre el pecado
  • Súplica e intercesión
    • Gracias, Padre, por enviar al Espíritu Santo para convertir a las cinco personas de mi lista de oración.
  • Acción de gracias

Entra en: https://adventista.es/oracion/

Descárgate el PDF del vídeo 8 en: https://bit.ly/2GSa9NN

Gabriel Díaz. Departamento de Evangelismo, Escuela Sabática y Ministerio Personal de la Iglesia Adventista del Séptimo Día en España.

 

Revista Adventista de España