¿Alguna vez te han hecho una pregunta sobre ciencia y fe, y tu pensamiento ha sido: “¿Y AHORA QUÉ DIGO?”. Esta serie te ofrece respuestas, una visión sobre los orígenes que no te enseñarán en clase, pero que también está basada en la ciencia.
1. Presentación.
Soy Noemí Durán. Soy una bióloga cristiana, creo en la Biblia y estudio el comportamiento animal.
2. ¿Cuál es su razón principal para creer lo que dice la Biblia acerca de los orígenes?
Confío en la Biblia y en lo que dice sobre los orígenes porque confío en el autor de la Biblia. Así que, incluso aunque haya algunas cosas para las que no tengo todas las respuestas, creo que Dios es el autor de la Biblia y, como lo conozco, confío en lo que dice cuando explica cómo hizo el mundo aunque no tengamos todos los detalles científicos de la historia.
3. ¿Qué ha aprendido sobre Dios en su campo de trabajo?
Soy bióloga y para un biólogo es fácil ver la mano de Dios en casi todo. Cuando observas incluso las células más pequeñas y ves esas máquinas moleculares de su interior, ves una gran cantidad de diseño, muchísima ingeniería en todas ellas. Y eso ocurre a todos los niveles, puedes ver ese mismo diseño en los animales, en sus capacidades, la capacidad de un pájaro para volar es algo increíble. Incluso en cosas como los ecosistemas, cómo están coordinados y todo funciona bien porque cada pieza está en su lugar. Así que veo diseño en todas partes, y ese diseño tiene que proceder de una mente muy, muy sabia, mucho más sabia que las nuestras y eso, eso debe de ser Dios.
4. Si ha trabajado alguna vez en un entorno laico, cuéntenos como vivió su fe en la Biblia y como fue su relación con sus compañeros no creyentes.
Yo trabajé en un zoológico. Era la directora de educación y trabajaba con colegas que no eran cristianos ni creían en la creación, y de hecho tenía una muy buena relación con ellos. Sé que esto no siempre es así para todo el mundo, pero lo fue para mí, y según mi experiencia creo que hay dos cosas que son muy importantes para tener una buena relación con tus compañeros de trabajo que quizás no creen en lo mismo que tú. Una de ellas es el respeto, si tú los respetas, ellos probablemente te respetarán a ti. Y la otra es que si te conocen y saben que eres una persona en la que se puede confiar, que eres un buen científico, que haces bien tu trabajo, entonces es más fácil que entiendan o acepten tus creencias, incluso aunque piensen que estás un poco loca o algo parecido. Pero si te conocen y confían en ti, les resultará más fácil darse cuenta de que tal vez haya algo en tus creencias sobre lo que merece la pena saber más.
5. Los científicos afirman que la selección natural es la fuerza guía de la evolución, la responsable de la gran variedad de vida compleja que vemos hoy a partir de un solo ancestro tipo bacteria. ¿Qué piensa usted de la selección natural?
La selección natural se describe generalmente como la fuerza impulsora de la evolución, pero si lo pensamos detenidamente, resulta difícil que pueda hacer lo que se supone que hace. A veces pensamos en la evolución como en ese fantasma o fuerza invisible que va buscando animales débiles o menos aptos para matarlos, pero en realidad, lo que mata a la cebra más débil en la manada es el león, no es la selección natural. La selección natural es solo una descripción del proceso que tiene lugar, y lo que sucede es que en una población con características diferentes, diferentes rasgos, algunos de ellos desaparecen. De modo que la selección natural en realidad está eliminando parte de la diversidad de las poblaciones. Sin embargo la evolución es todo lo contrario, la evolución consiste en crear algo nuevo, en crear más diversidad. Si observamos la selección natural, no es eso lo que hace sino que elimina parte de la diversidad de las poblaciones. Y como no tiene ninguna previsión ni ningún propósito, no puede crear nuevas adaptaciones o transformar animales en algo que se adapte mejor. Simplemente escoge, de entre lo que hay, lo que es mejor en circunstancias específicas.
6. ¿Creó Dios a los depredadores y a los parásitos?
Esa es una pregunta difícil. Cuando leemos la Biblia, cuando leemos Génesis 1, la interpretamos y vemos que todo era muy bueno, que los animales comían hierba, vegetales, así que podemos afirmar que no había depredadores ni parásitos que dañaran a otros animales en el plan original. Pero luego, cuando entró el pecado, todo cambió en la naturaleza, y Dios maldijo a la serpiente, a los seres humanos, y la Tierra comenzó a cambiar… Vemos que incluso a las plantas les crecieron espinas y pinchos; todo cambió. Así que los parásitos y los depredadores son el resultado del pecado, pero no conocemos los mecanismos exactos que los produjeron. No sabemos con exactitud si Dios hizo algunos cambios, cambios directos en ellos para que pudieran adaptarse al mundo posterior al pecado, o si ya les había dado la información genética para adaptarse después de que eso ocurriera, porque Dios sabía que existía la posibilidad del pecado, o si Satanás intervino de alguna manera, no lo sabemos. No sabemos el mecanismo exacto, pero no creemos que Dios creara a esos animales que matan o hacen sufrir a otros animales desde el principio, en su creación original.
7. ¿Son los animales principalmente egoístas o desinteresados? ¿De dónde vienen este tipo de comportamientos?
En realidad, depende de qué animales estemos hablando. Si hablamos de animales sociales, los animales que viven en grupos sociales, como los delfines, los elefantes o los chimpancés, los científicos han descubierto que la mayoría de las interacciones que tienen con otros miembros de su grupo, en realidad son de tipo pro-social. Y eso significa que cooperan entre sí, que trabajan juntos para obtener algo beneficioso para los dos, o los tres, para todos los que estén participando en una acción específica. Pero también que se ayudan entre sí incluso de forma altruista. Así que un animal puede compartir su comida con otro del grupo o puede llevar a cabo otros comportamientos altruistas, como ayudar a un miembro del grupo que esté herido o que tenga algún problema, o cuando pelean, porque a veces pelean, intentar reconciliar a los dos que estaban peleando, o consolar al que perdió la pelea. Todas estas cosas que generalmente vemos en los seres humanos, intentar hacer las paces o incluso entender lo que sucede en la mente del otro, lo que llamamos empatía, estos animales también tienen ese tipo de comportamientos, vemos exactamente los mismos patrones en ellos.
8. ¿Qué es la epigenética y por qué es importante en el debate de creación / evolución?
La epigenética es la rama de la genética que estudia lo que está encima o en la parte exterior del ADN. El ADN son los planos de un organismo, y las instrucciones para fabricar ese organismo son los genes que están codificados en el ADN con cuatro letras: A, G, T y C; y esa es la información para fabricar tus ojos azules, o tu cabello, o tus otros rasgos. Pero recientemente, los científicos han descubierto que existen mecanismos para controlar la expresión de los genes en la parte exterior del ADN. Hay etiquetas, pequeñas moléculas colocadas en diversos puntos del ADN que hacen que algunos genes se bloqueen, por lo que aunque tengas la información, esa información no se puede leer, no se puede expresar, así que es como si no estuviera ahí. Y en algunos otros lugares esas pequeñas etiquetas hacen que los genes estén abiertos y listos para usarse. Esto es muy importante, ya que esas pequeñas etiquetas en el ADN se ponen o se quitan dependiendo de factores ambientales: lo que comes, si estás estresado o si tomas medicamentos, todas esas cosas pueden afectar a que etiquetas están en tu ADN. Y la segunda cosa importante es que tus hijos van a heredar esas etiquetas de modo que pueden perpetuarse por varias generaciones. Lo que haces, lo que comes, afectará a la expresión de los genes de tus hijos o incluso de tus nietos.
9. ¿Cuál debería ser la actitud de los cristianos hacia la naturaleza y los problemas ambientales teniendo en cuenta que la Biblia dice que todo va a terminar ardiendo de todos modos?
Decir que no deberíamos cuidar el medio ambiente porque acabará quemándose de todos modos es como decir que como al final todos acabaremos muriendo no deberíamos cuidar nuestra calidad de vida, o ¿por qué debería limpiar mi casa si va a terminar sucia al final del día? Esa línea de razonamiento no tiene mucho sentido. Vivimos aquí, éste es nuestro hogar, este planeta es nuestro hogar y mientras vivamos aquí tenemos que cuidarlo, es nuestra responsabilidad. Dios nos dio a los seres humanos la responsabilidad de cuidar del resto de la creación y lo estamos haciendo francamente mal. Hemos causado un montón de cambios y como consecuencia hemos creado problemas ambientales, hay gente que está sufriendo y animales que están sufriendo. En algunos lugares no hay agua limpia para beber. Hemos causado cambios en los patrones climáticos que provocan catástrofes que están matando gente, cambios en el clima. Y todo eso es nuestra responsabilidad. De modo que deberíamos estar haciendo algo al respecto porque somos seguidores de Cristo, y cuando Jesús estuvo viviendo en esta tierra, hizo todo lo posible para eliminar el sufrimiento de las personas que lo rodeaban. Así que deberíamos estar en contra de cualquier tipo de sufrimiento y deberíamos trabajar activamente por las personas que sufren debido a los problemas ambientales, y también por los animales, porque toda la creación está clamando por una solución. Y aunque no podemos proporcionar una solución definitiva, eso lo hará Dios, mientras tanto tenemos que asumir la responsabilidad, y tenemos que hacer algo, y tenemos que hacerlo ahora.
Noemí Durán es bióloga especialista en comportamiento animal. Tiene un doctorado en Biología Marina por la Universidad de Loma Linda y es la directora de la sede europea del Geoscience Research Institute.
Un material producido por HopeMedia España (https://hopemedia.es/), con la financiación del Faith and Science Council y la colaboración del Geoscience Research Institute GRI (https://www.grisda.org/).