50º. ANIVERSARIO. Montserrat, 3-5 mayo 2024. ”Decíamos ayer…”. «Adventismo: PASADO, PRESENTE Y FUTURO». Por Francesc X. Gelabert.
Esta es una crónica “impresionista” de una celebración de oro. Los hechos en detalle están a un clic.[1] Ha sido medio siglo (!) de cambios como nunca antes se habían vivido… Así que hemos reflexionado sobre cómo hemos llegado hasta aquí y sobre el poso que tantos años nos han dejado. Y todo motivado e impulsado por hombres y mujeres inquietos intelectual y espiritualmente, que no han parado de ir acumulando juventud y contagiando entusiasmo.
Por qué Montserrat
Montserrat, siguiendo la tradición benedictina busca conservar y transmitir la cultura en que está enraizado, pero fiel a su principios y valores espirituales. Y AEGUAE busca lo mismo, con la pequeña gran diferencia de la 28 Creencias. Como se dijo en la inauguración el propósito de AEGUAE es «la búsqueda de la verdad y el servicio a Dios».
Y Carme Llorca empezó la celebración con: «Decíamos ayer…» y ayer fue del 11 al 14 de abril de 1974 en Santa Cecília de Montserrat. Porque hemos de seguir con el discurso para terminarlo. Por eso el único ponente que repitió sábado y domingo, fue el digno discípulo del aquel primer ponente, Jean Flori, Antonio Cremades, defendiendo, con nuevos y mejores argumentos, los nuevos (?) y mejores (?) argumentos evolucionistas.
Que se constituyera formalmente AEGUAE al amparo de la “montaña mágica” no pudo ser casualidad. En aquellos años del final de la dictadura, no era fácil que una reunión de conspicuos herejes, con algunos de sus miembros encarcelados, como el que suscribe con José Luis de la Fuente —mi cuñado hoy—, no era fácil que fueran, acogidos, para hablar de algo tan contracorriente como era el creacionismo. Y aquí había que celebrar el 25 Aniversario, y aquí se celebró. Y aquí hemos celebrado el quincuagésimo.
El actual abad de Montserrat, Manel Gasch, que tuvo a bien visitarnos y dirigirnos amables palabras, no pudo evitar recordarnos que ellos van por mil años, diciéndonos que para llegar a milenarios hay que empezar por ser cincuentenarios.
El director general d’Afers Religiosos de la Generalitat, Carles Armengol, en su alocución defendió que «el índice de libertad religiosa es muy signficativo del estado de las libertades», postulando que tiene que ser «una libertad activa y positiva». Pero lo más interesante fue su afirmación de que «la relación entre ciencia y religión es muy relevante e importante», defendiendo que «la fe religiosa no es irracional, y hay que luchar contra el reduccionismo» que opone fe y razón.
El lugar, la comodidad del alojamiento, la excelente megafonía, el buen ambiente de los 170 inscritos más las visitas… El buen continente, hizo que todos los actos tuvieran un áureo brillo. Gracias Ferran Sabaté, primer presidente de AEGUAE, y uno de los organizadores de la celebración.[2]
Emociones encontradas, paradojas y AEGUAE…
Antonio Cremades estuvo magistral en su exposición de la nada casual coincidencia del nacimiento del evolucionismo darwinista y el de nuestra iglesia a mediados del siglo XIX, y en su segunda intervención presentándonos la necesidad que tenemos los creacionistas de seguir buscando respuestas —bíblica, filosófica, científicamente— a todos los nuevos planteamientos que ofrecen los evolucionistas. Ahora bien, lo más emocionante y significativo, es que Antonio nos confesó que él, como estudiante de Biología, se sintió con fuerza y argumentos para ser creacionista, como fruto de aquella primera montserratina convención de AEGUAE, y las publicaciones que siguieron, que tan acertadamente fue presentada por Jean Flori, que abordó el dilema “¿Creación o evolución?”.
Si algo ha caracterizado, y hecho relevante, a AEGUAE ha sido su afán por estar al día en cuanto a los cambios científicos, filosóficos, socioculturales y religiosos, para analizarlos críticamente y aceptarlos en la medida de los posible, o combatirlos con sus mismas armas, siempre con la espada del Espíritu en mano. Teresa Forcades era lo máximo y más chocante que se nos podía ofrecer como botón de muestra en el 50 Aniversario. Monja benedictina de Montserrat, doctora en Medicina y en Teología, master of Divinity por Harvard, prolífica autora, presentadora de programas de televisión de gran audiencia en Catalunya… y conspicua animadora (algunos dirían, provocadora) cultural. Muy agustiniana y benedictina ella, en su ideario fundamental afirma que «san Agustín, en su obra De Trinitate […] dedica catorce libros a ponderar […] de que manera Dios siempre está más allá de lo que podamos captar con imágenes o con palabras».[3] El que suscribe tuvo que manifestarle públicamente que su teología, que ella pretendía bíblica, era patrística y no sé si romana ortodoxa, pero sí contraria a nuestro entendimiento. La imagen de Dios de la germana Teresa hace de Dios un creador por medio de la evolución transformista capaz de crear como hijos totalmente suyos y legítimos todos los tipos de géneros, subgéneros y transgéneros. Así que, graduados y estudiantes universitarios adventistas hispanos, nos toca ahora analizar, debatir; eso sí, con la Sola Biblia, encomendados al Espíritu Santo y al sentido común.
Me emociono de especialmente al recordar las palabras de presentación de Josep Manel Prat diciendo: «Ramon sabe hacerse las preguntas, las mejores preguntas» para conocer las mejores respuestas. Y lo calificó como «ratón de biblioteca» emulo de aquel gran ratón de todas las grandes bibliotecas públicas y privadas del mundo: Félix A. Vaucher, y su obra, ”Una celebridad en el olvido: El P. Manuel de Lacunza y Díaz”, admirable y eruditamente anotada por Ramon C. Gelabert,[4] fue presentada por él, y obsequiada a todos los ponentes e ilustres invitados. No cabe duda de que es, entre las muchas y magníficas publicadas por Aula7activa —todas a libre disposición en línea— la cumbre más alta y más erudita y significativa para la misión que AEGUAE se ha impuesto desde su fundación.
Como dijo Óscar López Teulé, presidente de la Unión Adventista Española, Roberto Badenas «no es presentable, porque no necesita presentación», su magisterio en las aulas, en los púlpitos, en los congresos, en la literatura cristiana de gran nivel y magnífico estilo y claridad, evitan toda presentación entre nosotros. El título de su ponencia lo dice todo: “Papel del universitario adventista en la sociedad actual. Pablo como paradigma del intelectual comprometido”.[5] A mí me impresionó el descubrimiento de su vocación. «Yo quería ser dibujante de tebeos», nos confesó, «pero mi madre quería que fuera médico o pastor». «Me apunté a Filosofía y Letras sin ninguna vocación». «Me llamaron de profesor de español a nuestro colegio superior de Collonges… y allí para aprovechar el tiempo me apunté a las clases de Teología…». Y ahí, por los caminos, jamás previstos por nosotros por donde nos hace andar el Señor,[6][1] el que soñaba con ser guionista de historietas gráficas, tenemos el privilegio de tenerlo en casa como maestro de teólogos, escritor que ha superado, y nos ha ayudado a superar, lo que el llama la educación (?) recibida «en un equilibrio inestable [y desestabilizador] entre la ley y la gracia», muy propio de los años cincuenta y sesenta, cuando, como solía decir Rafael Hidalgo Cobo, «los adventistas habíamos conseguido ser muy buenos católicos».[7] Y que bendición para varias generaciones de AEGUAE, que Roberto Badenas hay sido el ponente de las convenciones en seis de ellas, récord absoluto y virtualmente inalcanzable. Pero lo que hace grande a alguien tan grande como Roberto Badenas, es que considera que para él AEGUAE en su juventud fue «realmente terapéutica», curativa espiritualmente. Y que de esa cura él ha querido siempre motivarnos a una «fe inteligente», expresión que al menos aparece repetidamente en los escritos de Ellen G. White.
Otro grande como educador y como escritor, hijo también de AEGUAE presente en el 50 Aniversario, fue Julián Melgosa, también profesor, como Roberto, al máximo nivel académico en España y en diversos países extranjeros. Julián es hoy director asociado de Educación en la Asociación General, después de haber sido profesor y decano en Inglaterra, Filipinas y Estados Unidos. Nos habló de “El adventismo y su sistema educativo: pasado, presente y futuro”. El presente es impresionante, de ello dan fe las 118 universidades que patrocina nuestra iglesia, y algunas de gran prestigio como Loma Linda, Montemorelos (México) o la de Perú con más de doce mil alumnos, todas ellas con facultades de Medicina de gran nivel. Sin olvidar Andrews o la Southern Univesity, cuyos arqueólogos han realizado algunos grandes descubrimientos en el Cercano Oriente.
Como preparación de los actos de celebración, qué gran acierto fue que se hiciera una encuesta sobre la papel de la mujer en AEGUAE, y se comentaran debidamente los resultado. En AEGUAE siempre hemos sabido estar al día, y hasta cierto punto por delante. En la mesa redonda “AEGUAE con mirada de mujer” coordinada por Raquel Aguasca[8]. Y sobre todo dieron testimonio de que AEGUAC (C de Catalunya), germen de AEGUAE (E de España) fue el espacio donde según Mercedes Martínez Bou «se me despertaban inquietudes espirituales más profundas, una tabla de salvación que me ayudó a mantenerme a flote». Alexandra Mora nos dijo que AEGUAE ha sido para ella «aprendizaje, apreciación, espiritualidad, comunidad, de donde siempre he salido fortalecida. Hoy trabajo en la iglesia por mi experiencia en AEGUAE». Sarai de la Fuente afirmó: «He aprendido a ser iglesia…. Abres la mente a otras disciplinas que no sea solo tu carrera de medicina. Soy hija y heredera de AEGUAE y quiero transmitir sus valores las futuras generaciones». Nos advirtieron que en cincuenta años, AEGUAE ha tenido tan solo seis presidentas, y sí muchas vocales y todo tipo de currantes que quedan en el anonimato. A pesar de que nombres tan significativos como el de Aula7 se lo puso Marta Prats, y que Esther Amigó ha sido la cuasieterna diseñadora de la revista y de todo lo que haga falta.
Finalmente Joan Sabaté con su “Recuerdos de AEGUAE (micrófono abierto), consiguió que nos emocionáramos oyendo los emocionantes y aleccionadores testimonios de los que un día éramos unos jovencitos inquietos y un tanto despistados, hoy maduritos y despeinados (la mayoría de los varones ya no nos peinamos, ni falta que nos hace). Y es que AEGUAE ha sido testigo de medio siglo de conversiones en su seno, de los que se decían cristianos, e incluso adventistas del séptimo día, pero que descubrieron el evangelio y a Cristo en las publicaciones y en las convenciones de AEGUAE, y esto sin renunciar a la ciencia y al espíritu crítico, sino todo lo contrario.
Y además…
Tiene que constar que en la celebración, acorde con las esencias de AEGUAE, hubo contactos humanos de compañeros y colegas, después de cincuenta años. Para ellos fueron lo mejor y más importante e impactante del momento. Hubo actividades culturales tan interesantes como la visita al Museo Bíblico, una joya única en España, un excursión por los incomparables parajes monserratinos, etcétera, etcétera.
También, aunque se hizo hincapié, y con toda razón, en que AEGUAE es una organización de base —algo único, solo parangonable a la asociación de universitarios adventistas norteamericana, con su emblemática revista Forum—, la fidelidad a la Iglesia forma parte también del ADN de AEGUAE. Por eso no podía faltar la presencia y participación de Jonatán Bosqued, director de JAE, vocal neto por su cargo, presente con toda su familia. También contamos con la presencia e intervención de Óscar López Teulé, presidente de la Unión Adventista Española. Marc Gelabert, el tesorero de la Unión, también estuvo presente. Y estos dos últimos con sus respectivas familias.
Nombres ilustres que sonaron por lo que fueron, y por el legado que nos dejaron, y que ahora solo podemos reseñar, a riesgo de dejarnos alguno que a más de uno quizá le cambio la fe y la vida.[9] El primero y de especial impacto: Jean Flori. No menos impacto a muchos, con sus tres grados de la no violencia: Georges Stéveny. Carlos Puyol, hombre decisivo en la historia del adventismo en España, y gran apoyo del nacimiento y consolidación de AEGUAE. José López, uno de los grandes animadores de AEGUAE… Y sin olvidar a Félix A. Valtueña, insigne universitario adventista, y prácticamente el único en su época, que dejó huella indeleble en toda aquella generación de la fundación.
Y que no se nos olvide, como se dijo, que nuestro nombre Asociación de Graduados y Universitarios tiene un apellido: Adventistas de España. Y en apellido es lo que nos hace miembros de una familia, que, ojo, se remonta a Juan 14:1-3 y Mateo 24–25. Así que si milenario es el Monasterio, más milenarios somos los de AEGUAE que hacemos de nuestro principal motivo de existencia anunciar que nuestro fundador, anterior a “san” Benito, en quinientos años, esta vivo y un día de estos viene a por nosotros los vivos y los que se quedaron por el camino en estos dos milenios y en todos los anteriores. Lo digo, por Dom Manel Gasch, como me supongo, tiene la buena costumbre de informarse de todo lo que se escribe sobre lo que ocurre en la casa que tan dignamente preside.
Autor: Francesc X. Gelabert (Barcelona, 1951) es el marido de Amy, hermano de Ramon-Carles Gelabert y el padre de Marc Gelabert, suegro de Maya y abuelo de Sèphora y Angèlica. Fue vocal de AEGUAE en Sagunto y Madrid… Tres años colportor regular y 44 de editor. Ha escrito ¿Se puede confiar en la Biblia?, unos cuantos libros más y alguno más que le van a publicar este año, incluso uno traducidos al francés e inglés, y de innumerables artículos en Revista Adventista española, Ministerio Adventista y Revista del Anciano de Interamérica, Prioridades, Enfoque, Kerygma…
Hechos y datos revisados por Antonio del Pino.