Skip to main content

El sábado 21 de junio de 2025 fue una jornada inolvidable para nuestra iglesia de Jaén. En un ambiente lleno de gozo, fe y comunión, celebramos un programa especial que tocó profundamente los corazones de todos los presentes. El evento, cuidadosamente preparado con amor y oración, se convirtió en un testimonio vivo del poder transformador de Dios. El momento más emotivo fue, sin duda, el bautismo de cuatro personas que decidieron entregar sus vidas a Cristo: Cristina, Isaac, Marco y Antonio.

Con lágrimas en los ojos y sonrisas de esperanza, todos ellos descendieron a las aguas como símbolo de una nueva vida en Jesús. Cada bautismo nos recordaba que en el cielo hay un gran regocijo por cada alma que se entrega a Dios.

Música de alabanza e inspiradoras palabras

La música fue otro elemento central de todo el acto. Los cantos y melodías que sonaron a lo largo de toda la mañana, no solo embellecieron el programa, sino que prepararon el terreno para la reflexión, la adoración y la apertura al Espíritu Santo.

Hubo también palabras inspiradoras que tocaron fibras profundas. Los mensajes de conversión, esperanza y amor fueron claros: Dios sigue obrando, sigue llamando, y su gracia es suficiente para todos los que la buscan con sinceridad.

Este sábado fue mucho más que un programa especial. Fue una muestra viva de que la iglesia es un lugar de encuentro, restauración y nuevos comienzos.

Desde la Iglesia Adventista del Séptimo Día en Jaén damos la más cariñosa bienvenida a Cristina, Isaac, Marco y Antonio, nuestros nuevos hermanos en la fe, y les deseamos que puedan seguir caminando, diariamente, de la mano de Jesús.

Que lo vivido el 21 de junio sea solo el comienzo de muchas más vidas transformadas y corazones encendidos por el amor de Cristo.

¡Gloria a Dios por su obra, y gracias a todos los que hicieron posible este día tan especial!

Autora: Candy Vela, corresponsal de revista.adventista.es en la Iglesia Adventista del Séptimo Día en Jaén. 
Foto: Cristina, Tania, etc.

Leave a Reply