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El sábado 13 de julio de 2024, en presencia de los miembros de la iglesia Lepanto Castellón, amigos y familiares, y sin duda también de los testigos celestiales, Silvia y Viorel, madre e hijo, recibieron el bautismo en el entorno natural del Río Mijares, término municipal de Arañuel- Comunidad Valenciana.

Hay diferentes modos a través de los cuales Dios se revela. Lo hace de una forma muy especial a través de la naturaleza y de los profetas, y sobre todo a través de la persona de Jesucristo, nuestro Salvador.

Y es en las aguas del bautismo donde se produce un encuentro muy especial con Jesús. Es allí donde se sigue su ejemplo y se le acepta como Salvador y Señor. En esos momentos se siente que Dios también se está manifestando con mucha claridad, y especialmente cuando una ceremonia tan hermosa se realiza en plena naturaleza, que es su primera revelación.

Bautismo de Silvia y Viorel

En el especial marco natural del Río Mijares se escucharon cánticos de alabanza, oraciones, y recordamos, mediante la palabra de Dios, la experiencia de Felipe, bautizando al etíope, tesorero de la reina Candace, que buscaba con todo su corazón al Señor.

¡Qué hermoso es cuando la búsqueda sincera tiene resultado! Al igual que el etíope, Silvia y Viorel encontraron lo más preciado que la vida nos puede ofrecer: una relación eterna con Jesús. Y, además, ellos encontraron una familia que los acogió con abrazos y palabras de cariño y afirmación. Más aún, la iglesia se comprometió a cuidar a sus recientes miembros y también a continuar con la misión de predicar la pronta venida del Señor.

Cada ceremonia que vivimos nos recuerda la importante responsabilidad de implicarnos en la hermosa obra de hacer llegar el evangelio a toda persona de este mundo. La revelación que nos ha sido dada no es solo para guardarla, es para compartirla. Mediante la labor del Espíritu Santo, en el día de hoy, mientras lees esta feliz noticia, Dios ya ha preparado el terreno para que testifiques por lo menos a una persona. ¡Aprovéchalo!

«Dios espera un servicio personal de cada uno de aquellos a quienes ha confiado el conocimiento de la verdad para este tiempo. No todos pueden salir como misioneros a los países extranjeros, pero todos pueden ser misioneros en su propio ambiente para sus familias y su vecindario». (Elena de White, Testimonios para la iglesia, tomo 9, página 30).

Autor: Laurentiu Stefan Druga, pastor de la Iglesia Adventista del Séptimo Día en España. 
Revista Adventista de España