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La solidaridad no debe ser una virtud relegada solo a la Navidad. Si bien en las fiestas navideñas proliferan las campañas solidarias, hay muchas formas de ser solidario durante todo el año. Si deseas realizar tareas de ayuda, cuentas con un amplio abanico donde elegir.

1. Contribuye económicamente.
Existen muchas formas de hacer aportaciones económicas a causas solidarias. Lo puedes hacer de forma puntual para un proyecto concreto, o de forma permanente asociándote o adquiriendo un compromiso de aportación fija periódica como ocurre, por ejemplo, con los apadrinamientos. Además, las nuevas tecnologías han facilitado mucho las formas de pago, de manera que, sin moverte del salón de casa, a través de internet, puedes aportar tu pequeño granito de arena.

2. Comparte con quien más lo necesita.
Existen un montón de opciones que te permiten ayudar a los que más lo necesitan. Por ejemplo, cuando vayas a hacer la compra semanal de tu casa, puedes hacerla por duplicado para entregar esa compra extra a alguna familia necesitada o a algún albergue. Un caso de este tipo de acciones es la iniciativa de los #cafespendientes, gracias a la cual, cuando tú te tomas un café, puedes dejar otro pagado para quien no pueda costeárselo.

3. Dona objetos y enseres personales.
Esta es una buena fórmula si tu economía personal no es la más boyante pero quieres colaborar ofreciendo lo que tienes. Si tienes libros que ya no lees y no sabes qué hacer con ellos, puedes entregarlos a la librería solidaria Libros Melior, que vende libros de segunda mano, donados por particulares y organizaciones, y destina los fondos recaudados a financiar las actividades y campañas de la Fundación.

Por su parte, la ONG Humana, recoge ropa usada. Aproximadamente el 12 % de esa ropa está en buen estado y es susceptible de ser vendida, por lo que se destina a las tiendas de ropa de segunda mano de Humana España. Alrededor del 48 % también se vende a pequeños comerciantes de África para reactivar la economía local. El 32 % es ropa muy desgastada, inservible, que se recicla a través de empresas especializadas. Mientras que el 8 % restante es ropa no reutilizable fabricada con tejidos no reciclables que se envía directamente a los vertederos. Con todos estos procesos, Humana consigue recursos económicos para sus proyectos de cooperación para el desarrollo.

4. Ofrece tu tiempo y afecto.
Si no tienes ni dinero ni cosas materiales que ofrecer, esa no es una excusa para no ser solidario, siempre puedes ofrecer tu tiempo colaborando como voluntario en campañas eventuales, pero constantes como por ejemplo las de recogida de alimentos.

También se puede hacer de forma continuada colaborando semanalmente con alguna ONG que trabaja con niños, mayores, discapacitados o personas en riesgo de exclusión. Este tipo de proyectos suelen prestar especial atención a las necesidades afectivas además de las económicas. Así, los voluntarios de la Asociación Infantil Oncológica de la Comunidad de Madrid (ASION) tratan de ser un pequeño oasis de diversión para los niños que, con su alegría, son capaces de infundir nuevas energías a sus padres y los familiares que los acompañan en la dura lucha contra el cáncer infantil.

5. Participa en actividades de sensibilización.
Esta labor es muy amplia y va desde lo que promulga el famoso refrán de “predicar con el ejemplo” hasta la labor de difundir las campañas por doquier. Hay que compartir las campañas de sensibilización con la versión clásica del tú a tú con las personas de nuestro entorno, o a través de las nuevas tecnologías y las redes sociales que multiplican exponencialmente la difusión y el alcance. Así, gran parte de la labor de la Fundación Melior comienza con la sensibilización social y la promoción de un cambio de pensamiento. Utiliza su web melior.is y sus redes sociales para crear una comunidad convencida de ser motor de cambio.

No obstante, la sensibilización de Melior traspasa internet para materializarse al lado de los que son el futuro de esta sociedad: los niños. Aprovecha el bagaje y la experiencia de los mayores con el grupo de cuentacuentos “Los mayores también cuentan” que imparte la unidad lúdico-didáctica acerca de la solidaridad desarrollada por Melior. Estos recursos están disponibles para que los que lo deseemos podamos utilizarlos con nuestros hijos e infundirles el espíritu solidario.

6. Organiza tu propia campaña solidaria.
Si eres una persona inquieta, siempre puedes desarrollar tu propia acción solidaria como, por ejemplo, encargarte de organizar un mercadillo solidario en tu vecindario para recaudar fondos para la campaña o proyecto que desees o incluso llevar a cabo tu propio proyecto si eres más osado.

7. Lánzate a la aventura.
Los programas de voluntariado internacional permiten vivir una experiencia única en otros países. Este voluntariado se suele realizar en los periodos vacacionales de los voluntarios que convierten sus días de descanso en unas vacaciones solidarias a menudo más reconfortantes que los días de sol y playa en resorts de turismo y ocio. Hay organizaciones específicamente especializadas en programas de voluntariado internacional, como es el caso de Cooperatour que lleva a cabo proyectos en América Latina, India y Nepal.

8. Sé solidario con el medioambiente.
Este es otro tipo de solidaridad que implica desarrollar la conciencia ecológica y la responsabilidad medioambiental. Esto se puede simplificar en estar comprometido con un correcto reciclaje por ejemplo. Sin embargo, también puede incluirse dentro de otro tipo de campañas solidarias como las mencionadas anteriormente de donación de objetos y enseres personales, que cumplen una doble función: la de ofrecer recursos para recaudar fondos y la de dar una segunda vida a las cosas que ya no utilizas, contribuyendo así a un mejor aprovechamiento de los recursos y a la conservación de nuestro planeta Tierra.

9. Sé solidario con la donación de órganos.
Hay personas que no necesitan recursos económicos o ayuda, lo que necesitan es salud. Para ayudar a esas personas podemos donar sangre, hacernos donantes de órganos o incluso de médula. Sin embargo para poder practicar esta solidaridad, debemos desprendernos del miedo. El temor nos frena a la hora de participar en este tipo de acciones que, sin embargo, pueden salvar vidas.

Si quieres saber dónde se te necesita, no dejes de inscribirte en la Plataforma del Voluntariado de España, que cuenta con un buscador de voluntariado presencial, con las ofertas de ONG clasificadas por ámbito y localidad, y un mapa del voluntariado con las organizaciones más cercanas donde poder colaborar. También hay directorios de demandas de voluntarios en voluntariado.org y hacesfalta.org.

Revista Adventista de España