«Las oraciones de mi Maestro». Ese fue el título de la Semana de énfasis espiritual que disfrutamos en la iglesia adventista de Barcelona-Guinardó, del 20 al 27 de mayo de 2023, de la mano del pastor Ricardo Betancur.
Posiblemente, pueda resultarte familiar su nombre, por haberlo visto en alguna matutina basada en las oraciones más poderosas de la Biblia.
Sabemos que cada ministro y predicador tiene sus cualidades, dones y sensibilidades. Pero lo cierto es que poder contar con la experiencia de 70 años de vida (con episodios impactantes desde su propio nacimiento) es un privilegio. Además, el pastor Betancur tiene 46 años de ministerio, y un gran amor por el colportaje. Eso sin contar los muchos años dedicados a la edición, escritura y poesía, tanto en la Asociación Casa Editora Sudamericana como en Pacific Press, o su profesorado en la Universidad de Andrews. Sin duda, su formación y experiencia hicieron de esta oportunidad una experiencia profunda, enriquecedora y nutritiva para nuestra iglesia.
Oraciones y trato personal
El sueño del pastor Bentancur se cumplió al poder predicar aquí en Europa (por sus raíces familiares). Se notó que lo hizo desde el corazón y el respeto, buscando vivir la predicación y el pastorado, en medio de tantas horas de despacho con la edición de libros. De hecho, quiso dedicar cada día un tiempo a poder atender a todas las personas que quisieron hablar y orar con él, lo cual fue muy valorado.
Tanto para la familia anfitriona como para un servidor, fueron muy interesantes las conversaciones personales con él. Cada desplazamiento se convertía en una valiosa oportunidad para crecer. Sus oraciones escritas al inicio y final de cada tema nos quedarán en la memoria.
Su mensaje de exhortación a una vida en profundidad con la Palabra y la Oración viva, a partir de las diversas oraciones de Jesús de Nazareth, quedó bien grabado en nuestras mentes.
Toda una invitación a la vivencia con un Dios real, cercano, presente en cada detalle de nuestras vidas, al igual que en la vida de Cristo. Su mensaje ayudó a la maduración del fruto a través de bautismos que, Dios mediante, viviremos en breve en nuestra iglesia.
Agradecimientos
Muchas gracias, de forma especial, al pastor Bentancur y a su familia, por este tiempo de calidad dedicado a nuestra iglesia. Gracias por atendernos en medio de su apretada agenda. Gracias también, tanto al equipo de la Unión Adventista Española (UAE), como a Conferencia General por la oportunidad de haber podido vivir esta experiencia de crecimiento y desarrollo espiritual. Ojalá pueda repetirse, con la ayuda de Dios.
Finalizo con una frase suya: «Orar es vivir, y vivir es orar siempre».
Autor: Daniel Moreno, pastor de la Iglesia Adventista del Séptimo Día en España.