Mañana, 14 de junio, se celebra el Día Mundial del Donante de Sangre y la Iglesia Adventista del Séptimo Día reafirma su compromiso con la vida y la salud mediante la participación activa y continua de sus miembros en la donación voluntaria, no solo en fechas conmemorativas, sino durante todo el año. Este gesto solidario es una manifestación concreta del amor al prójimo, uno de los principios fundamentales de la fe cristiana que profesamos.
La donación de sangre es, para los adventistas, una expresión de solidaridad, compasión y compromiso con el bienestar físico y espiritual de la sociedad. Donar sangre es una forma práctica de seguir el ejemplo de Jesús, quien dedicó su vida a sanar y ayudar a los necesitados.
Desde hace décadas, comunidades adventistas en distintas regiones del mundo participan en las campañas de donación como parte integral de su misión de servicio. Jóvenes, adultos y profesionales de la salud dentro de la iglesia se suman regularmente a esta causa, conscientes de que una sola donación puede salvar hasta tres vidas.
Esta práctica está alineada con la visión adventista de promover un estilo de vida saludable y de cuidar la vida en todas sus etapas. Además, es una manera de contribuir activamente al sistema de salud pública, especialmente en contextos donde la necesidad de sangre es constante y urgente.
Día Mundial del Donante de Sangre
Este día representa una valiosa ocasión para reconocer la generosidad de quienes donan sangre de manera voluntaria, y para destacar la importancia de realizar donaciones frecuentes que aseguren el suministro constante y seguro de sangre y sus componentes.
El Día Mundial del Donante de Sangre, establecido por la Organización Mundial de la Salud (OMS), busca:
- Honrar a los donantes: Valorar el compromiso y altruismo de quienes ofrecen su sangre para ayudar a otros.
- Crear conciencia pública: Difundir el mensaje sobre el papel vital que tiene la donación de sangre en la atención médica y en la salvación de vidas.
- Incentivar la donación habitual: Motivar a las personas a adoptar este acto como una práctica solidaria, constante y consciente en beneficio de toda la sociedad.
Dona sangre, salva vidas
La Iglesia Adventista invita a toda la comunidad a unirse a este esfuerzo continuo. Donar sangre es donar vida, y como cristianos, creemos que amar al prójimo también significa estar dispuestos a ofrecer lo mejor de nosotros por su bienestar.
Solo en 2024, miles de miembros en América Latina, Europa, África y Asia participaron en jornadas organizadas junto a bancos de sangre locales, muchas de ellas en el marco del Día Mundial del Donante de Sangre, celebrado el 14 de junio. Este esfuerzo es parte del proyecto global Vida por Vidas, una iniciativa adventista que fomenta la donación frecuente y voluntaria, especialmente entre jóvenes.
La Iglesia Adventista del Séptimo Día reafirma su llamado a cuidar y preservar la vida como un don sagrado. Donar sangre representa un acto de amor incondicional hacia aquellos que luchan por sobrevivir. Cada gota cuenta, y cada vida vale.
Autora: Dra. Sarai de la Fuente Gelabert, directora del Departamento de Salud de la Iglesia Adventista del Séptimo Día en España y Esther Azón, redactora y coeditora de revista.adventista.es.
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