La Orquesta Juvenil Harmonía de la Iglesia Adventista de Jaén puso la nota emotiva al acto de entrega de premios a la mejor tarjeta navideña, organizado por el Patronato de Asuntos Sociales del Ayuntamiento, ofreciendo un concierto de villancicos que llenó de alegría y cercanía a personas mayores, cuidadores y familiares.
La música de los villancicos de La Orquesta Juvenil Harmonía puso emoción y cercanía al acto de entrega de premios a la mejor tarjeta navideña dirigido a personas mayores y sus cuidadores.
La Navidad tiene muchas formas de hacerse presente, y una de las más hermosas es a través de la música. Así quedó patente en el pequeño concierto de villancicos ofrecido por la Orquesta Juvenil Harmonía de la Iglesia Adventista de Jaén, en el marco del acto de entrega de premios a la mejor tarjeta navideña, organizado por el Patronato de Asuntos Sociales del Ayuntamiento de Jaén y dirigido a personas mayores y a quienes las cuidan día a día.
El evento reunió a mayores, cuidadoras, familiares y representantes institucionales en un ambiente festivo, donde la creatividad de los ancianos —expresada en sus tarjetas navideñas— y el reconocimiento por parte de la institución social fueron los verdaderos protagonistas. El acto se completó con la música, «el mejor lenguaje para cualquier celebración».
Una selección de villancicos tradicionales
La joven Orquesta Harmonía, bajo la dirección de Candy Vela, interpretó una cuidada selección de villancicos tradicionales, ofreciendo un concierto sencillo, pero profundamente significativo. Las melodías, conocidas por todos, despertaron recuerdos entrañables y arrancaron sonrisas cómplices entre el público, que acompañó con sus voces todas las piezas.
Los integrantes de la orquesta, con profesionalidad y entusiasmo, demostraron que la música no entiende de edades y que, cuando se ofrece con el corazón, es capaz de llegar a cualquier lugar. Su participación añadió un valor especial al acto, subrayando el espíritu solidario y comunitario que caracteriza estas fechas.
El pequeño concierto de villancicos de Harmonía no fue solo un broche musical para la entrega de premios, sino un recordatorio de que la Navidad cobra su verdadero sentido cuando se comparte. En Jaén, esa tarde, la música se convirtió en «un abrazo cálido para quienes más lo agradecen».
Gloria a Dios por estos jóvenes siempre dispuestos y por su dirección constante, que hace posible acercar nuestra iglesia a la ciudad de Jaén.
Autora: Candy Vela, corresponsal de revista.adventista.es en la Iglesia Adventista del Séptimo Día en Jaén.






