Lee Para el Estudio de esta Semana: Mateo 5:2-16, 38-48; Romanos 12:20, 21; Lucas 16:19-31;12:13-21; Mateo 25:31-46.
Después de ver que Jesús vivía preocupándose por los demás, especialmente por los que sufrían y estaban perdidos, es de esperar que Jesús también tenga mucho que decir acerca del cuidado de los demás. Y efectivamente así es.
La enseñanza de Jesús es práctica. Se centra en lo que significa vivir como seguidor de Dios. Por lo tanto, podemos ver que Jesús nos insta a actuar con justicia, bondad y misericordia, así como él mismo lo hizo mientras estuvo aquí en la Tierra. Si seguimos su ejemplo, serviremos a los demás como él lo hizo.
Jesús también habló del Reino de los cielos. En la descripción de Jesús, el Reino de los cielos es una realidad de la que podemos formar parte, incluso ahora. Es una forma de vida que funciona con un conjunto de prioridades, valores y principios morales diferente de los que se encuentran en los reinos terrenales. Las enseñanzas de Jesús establecen el mapa para este Reino, que incluye un fuerte énfasis en cómo servimos a Dios y, al servirlo, cómo debemos relacionarnos con los demás. También descubrimos que servir a los demás, (atendiendo sus necesidades y motivándolos), es una forma en la que podemos ofrecer un servicio directo a Dios.