La iglesia de Badalona conmemoró, en noviembre, el día contra la violencia contra la mujer y reivindicó el derecho de las mujeres a vivir en una sociedad libre de violencia. Y es que, la iglesia deber ser un espacio libre de violencia de género y un lugar seguro para nuestra infancia.
La directora de Ministerio de la Mujer de Badalona, Micaela Palacios, acompañada por un amplio equipo de colaboradoras y líderes, organizaron una actividad especial para expresar un mensaje de apoyo y respaldo de parte de la Unión Adventista de España (UAE) y la Conferencia General de los Adventistas del Séptimo Día para todas las mujeres de la iglesia.
Una lacra presente, también, en nuestras iglesias
La situación de la sociedad en materia de violencia de género es un serio problema, incompatible con la dignidad humana y los derechos humanos fundamentales.
Por eso, la iglesia está dotando a sus congregaciones de protocolos y herramientas de prevención y denuncia para mitigar, erradicar y restaurar a cualquier persona que pueda estar viviendo esta situación tan delicada.
Nuestra iglesia no está exenta de esta lacra. Por eso, la UAE pone a disposición de la iglesia una serie de herramientas y protocolos de actuación muy valiosos para tener iglesias más seguras. Iglesias que sean un oasis de cuidado y protección para nuestras mujeres, ancianos y niños, así como para cualquier persona en situación de vulnerabilidad y riesgo.
Lo primero es no invisibilizar el tema. Existe y hay que afrontarlo. Aunque nos duela, hay «lobos vestidos de ovejas», también en nuestra iglesia.
Orientadora en violencia de género
Lo segundo es poner a funcionar el Ministerio de la Mujer en la iglesia local, con el añadido de la figura de la orientadora en violencia de género. Una figura que facilita y ayuda de manera real y efectiva a las víctimas para apoyarlas material, psicológica y espiritualmente, a través de los mecanismos eclesiásticos y oficiales del Estado español.
En este sentido, el Ministerio de la Mujer, también en Badalona, tiene una misión que cumplir en este ámbito, además de los ya mencionados: es un lugar idóneo para abordar las necesidades espirituales, emocionales, físicas y sociales de las mujeres de cualquier edad en la iglesia, alentándolas a mejorar su potencial de participación en la misión de la iglesia.
En resumen, el objetivo principal de este ministerio es: Nutrir, animar, desafiar, equiparar, capacitar, apoyar e inspirar a las mujeres de una manera única y personal para que divulguen el evangelio.
Desde 1898
Un dato importante:
Es notorio de que ya en el año 1898 la iglesia adventista fundó este Ministerio de la Mujer. Por tanto, la iglesia ya tenía una visión adelantada de como cuidar, amar y apoyar este colectivo tan importante y significativo de nuestra iglesia. Así, la iglesia tiene un acervo espiritual, intelectual y teórico, que puede ayudar mucho a la sociedad, si decidimos dar un paso al frente y ofrecer soluciones.
Jesús dejó un mandato claro y una norma elevada:
Sobre la violencia: Mateo 5: 21-22
«Oísteis que fue dicho a los antiguos: “No matarás”, y cualquiera que mate será culpable de juicio. 22 Pero yo os digo que cualquiera que se enoje contra su hermano, será culpable de juicio; y cualquiera que diga “Necio” a su hermano, será culpable ante el Concilio; y cualquiera que le diga “Fatuo”, quedará expuesto al infierno de fuego».
Respecto a los niños: Mateo 18:6
«Y cualquiera que hace tropezar a alguno de estos pequeños que creen en mí, mejor le fuera que se le colgara al cuello una piedra de molino de asno, y que se le anegara en lo profundo del mar».
Relativo a nuestro proceder en la iglesia: Mateo 5:23
«Por tanto, si traes tu ofrenda al altar y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti, 24 deja allí tu ofrenda delante del altar y ve, reconcíliate primero con tu hermano, y entonces vuelve y presenta tu ofrenda».
Con relación al que sufre y no recibe justicia: Mateo 5:4-6
«Bienaventurados los que lloran, porque recibirán consolación. Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque serán saciados».
Autor: Amenothep Zambrano, responsable de comunicaciones y corresponsal de la Revista Adventista de España, en la Iglesia Adventista del Séptimo Día en Badalona.
