En el marco de la conmemoración, durante el pasado mes de noviembre de 2024, del día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, la Iglesia Adventista lanza nuevamente su programa mundial enditnow® En esta ocasión, el viernes 22 y sábado 23, el ministerio de la mujer de la Iglesia de Madrid-Alenza (MAR) realizó su programa: «Quiero una Iglesia sensible al trauma, ¿y tú?».
MAR (Mujeres Alenzanas en Red) es el nombre que han designado para el departamento de las mujeres en nuestra iglesia, junto con el color azul de su camiseta. «Un color que representa la vastedad y la profundidad del amor de Dios. Un amor que deseamos reflejar en nuestra comunidad. En Isaías 43:2, Dios nos promete que «cuando pases por las aguas, yo estaré contigo»; y de la misma forma, como MAR, queremos estar presentes, en red, para acompañar, fortalecer y levantar a cada mujer que lo necesite».
Programación viernes y sábado
El viernes comenzamos con la presentación de dinámicas, oraciones y un taller presentado por Sara Hernández, especialista en el tema de violencia de género.
El sábado por la mañana, continuamos, con una recopilación histórica del enditnow®, que es, como se explica en su página: «la postura más importante que la Iglesia Adventista del Séptimo Día haya tomado con respecto a la violencia contra mujeres, hombres y niños. A través de esta campaña, se espera que más de 15 millones de miembros de la iglesia adventista, hombres, mujeres y niños, creen un movimiento global que se movilizará dentro de sus propias comunidades, donde cada persona trabajará activamente para crear conciencia y compartir soluciones sobre las formas de terminar con este problema global».
El tema central estuvo a cargo de Elisabeth Sandoval, directora del departamento. «No me dejes ir», fue el tema elegido, como la iglesia puede ser un lugar de apoyo y acompañamiento aquellos que han sido víctimas. Dejando cinco ideas prácticas para ser una iglesia sensible al trauma:
- Escuchar sin juzgar.
- No aislar a la víctima después de su revelación de maltrato o abuso.
- Brindar calidez y apoyo auténtico, que promueve la sanidad.
- Hablar de los peligros del abuso y hacer responsables de sus actos a los perpetradores.
- Trabajar para hacer de nuestra iglesia una comunidad segura.
Panel «romper el círculo: en mi iglesia sí se habla de esto»
Llegadas las 17.30 h comenzamos la tercera parte del programa: un monólogo en el que se representaba a una de las hermanas Mirabal, Las Mariposas. El crimen de Patria, Minerva y María Teresa sucedió el 25 de noviembre de 1960. Se oponían al gobierno del dictador dominicano Rafael Trujillo. La ONU estableció en 1999 que el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las mujeres se celebrase cada 25 de noviembre en recuerdo a las hermanas Mirabal, que fueron brutalmente asesinadas, su lucha se recuerda en todo el mundo.
En la segunda parte se desarrolló un panel titulado: «Romper el círculo: en mi iglesia sí se habla de esto». Se visualizaron distintas escenas de una película, entre preguntas, respuestas e intervenciones acertadas de las panelistas con amplia experiencia en el tema de la violencia de género, como, Maya Mercier, trabajadora social; Elisabeth Sandoval, psicóloga; y Maribel Gómez, psicóloga y orientadora de la Iglesia de Alenza.
Desde MAR creemos que estos temas son tan delicados como espinosos; pero no por eso deben dejarse de hablarse. Es vital prevenir y educar.
Que Dios nos ayude a ser instrumentos de ayuda, escucha y apoyo solidario para quien lo necesite.
«Ayúdanos, Señor, a ser como Tú, que defiendes a los huérfanos y a los que son maltratados; tú los animas y les prestas atención». (Salmos 10:17-18 TLA).
Autora: Ramielys Mejía, colaboradora de MAR (Mujeres Alenzanas en Red), en la Iglesia Adventista del Séptimo día en Madrid-Alenza.
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