El evento destacó la importancia del papel de la mujer en la comunidad religiosa y su participación en la misión de la iglesia.
El pasado sábado 1 de marzo, la Iglesia Adventista de A Coruña conmemoró el Día Internacional de Oración de la Mujer con una jornada especial organizada por el Ministerio de la Mujer. La celebración tuvo como objetivo orar por el papel fundamental de la mujer en la comunidad religiosa y fomentar su participación activa en la vida y misión de la iglesia.
Un mensaje de Jesús hacia las mujeres
La jornada comenzó con un sermón matutino impartido por el pastor Diego Angulo, basado en el relato bíblico de la mujer con flujo de sangre, según el Evangelio de Marcos 5:21-34. Este mensaje, escrito por la teóloga Charissa Torossian, resaltó el amor incondicional de Jesús hacia las mujeres, en especial aquellas marginadas por la sociedad de la época. Jesús, al referirse a la mujer como «hija», demostró su compasión y reconocimiento de su dignidad, un mensaje que conmovió a todos los asistentes. La reflexión culminó con un momento de oración sobre cómo debemos considerar a las mujeres según la enseñanza de Jesús.
Un taller para reflexionar y fortalecer la comunidad
Por la tarde, Luzday Delgado, Daniela Leal y Begoña Guerrero dirigieron un taller interactivo titulado «Descubriendo la alegría de ser su hija», dividido en tres segmentos clave.
Participación activa de la mujer en la iglesia: En esta sección, se dialogó sobre cómo potenciar la presencia femenina en la vida comunitaria, reconociendo los dones y habilidades que Dios ha otorgado a cada mujer para contribuir a la misión evangelizadora.
Rompiendo estereotipos: Se abordaron los roles culturales impuestos a las mujeres y cómo estos pueden limitar su desarrollo dentro y fuera de la iglesia. Los asistentes reflexionaron sobre la importancia de desafiar estas percepciones para permitir que las mujeres ejerzan plenamente sus talentos y vocaciones.
Creando una iglesia segura e inclusiva: La última parte del taller se centró en estrategias para hacer de la iglesia un espacio acogedor, donde cada persona, en especial las mujeres, se sienta valorada y protegida.
Un cierre de comunión y compromiso
La jornada concluyó con una merienda que permitió continuar con las conversaciones iniciadas durante el taller en un ambiente distendido. Este espacio de confraternización fortaleció lazos y fomentó la creación de grupos de apoyo entre las mujeres de la congregación.
Este evento reafirmó el compromiso de la Iglesia Adventista de A Coruña con la dignidad y el valor de la mujer, destacando la convicción bíblica de que tanto hombres como mujeres fueron creados a imagen de Dios. La celebración no solo sirvió para orar y reflexionar, sino también para inspirar un cambio positivo dentro de la comunidad, promoviendo el respeto, la inclusión y la equidad.
Autor: Diego Angulo, pastor de la Iglesia Adventista del Séptimo Día en España.