Resumen de la Jornada médico científica celebrada el 6 de junio del 2023.
Como Iglesia Adventista tenemos el privilegio de haber recibido un extraordinario mensaje acerca de la salud. Al mismo tiempo tenemos la responsabilidad y deber de compartir este mensaje quienes puedan beneficiarse de unos conocimientos y un de estilo de vida saludables.
Reformadores de la salud
Mientras que en la sociedad estadounidense de mediados del siglo XIX el interés por el cuidado de la salud se extendía de forma generalizada, los primeros adventistas no habían interiorizado todavía el concepto de reforma de la salud en su día a día.
Incluso algunos de nuestros destacados pioneros como James White o John N. Andrews cayeron gravemente enfermos, en parte como consecuencia de la falta del cuidado de su estilo de vida.
Otros como Joseph Bates, en cambio, estaban adheridos a las prácticas de su época sobre la reforma de la salud, pero no lo experimentaban de una forma integrada con la vivencia espiritual cotidiana.
Precisamente fue en este contexto en el que Ellen G. White recibió las visiones sobre la reforma de la salud. La más destacada de ellas, aunque no la primera, ocurrió en la localidad de Otsego (Michigan, EEUU) el 6 de junio de 1863, solamente dos semanas después de haberse constituido formalmente la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Podríamos decir que la primera misión que se le encomendó a la Iglesia Adventista recién fundada fue incorporar el mensaje de salud a la proclamación del mensaje de los tres ángeles.
160 aniversario
Ha sido en esta misma fecha, 6 de junio, pero 160 años después, cuando hemos podido disfrutar de la primera Jornada Médico Científica de este periodo quinquenal. ¡Y deseamos que no sea la última!
La coincidencia de la fecha tenía la intención de conmemorar aquel acontecimiento sucedido en Otsego y al mismo tiempo agradecer todos los conocimientos y sabiduría que Dios nos transmitió a través de su profeta Ellen G. White, de los cuales somos no solo depositarios para disfrutar, sino también estamos encomendados a transmitir como parte fundamental de la misión adventista.
Blue zones y estilo de vida
Se podría decir que el estilo de vida y de cuidado de la salud adventista, tiene un máximo representante en la comunidad adventista de Loma Linda (California, EEUU), ya que su población es reconocida mundialmente como una de las cinco regiones más longevas de todo el planeta.
Estas regiones con récord de longevidad se conocen como blue zones, zonas azules. La primera vez que surgió este nombre fue a partir de la publicación de un estudio demográfico en 2004 sobre la distribución de personas centenarias en la población de la isla de Cerdeña (Italia).
Posteriormente, diversos estudios e investigaciones han ido definiendo las características de estas famosas blue zones, ofreciendo conclusiones sobre los perfiles de estilo de vida que se relacionan con una mayor longevidad en estas regiones.
El ejemplo de este diagrama muestra las características tanto propias como comunes de tres de las zonas azules: Loma Linda (EEUU), Cerdeña (Italia) y Okinawa (Japón).
Las tres zonas tienen común los siguientes aspectos del estilo de vida: fuertes lazos familiares, compromiso social, práctica constante de actividad física moderada, disfrutar del sol, del aire libre y de la naturaleza, evitación del tabaco y el alcohol, alimentación basada en plantas, con consumo de legumbres y granos integrales, una gestión del tiempo sin estrés y una vivencia espiritual de fe.
Participación y coloquio
Durante el coloquio vía Zoom que tuvo lugar en nuestra Jornada Médico Científica, alrededor de 40 profesionales de salud y personas interesadas, tanto de España como de universidades adventistas en Latinoamérica, tuvimos la oportunidad de compartir y valorar diferentes estudios publicados en revistas científicas sobre las distintas regiones blue zones y el estilo de vida de sus poblaciones.
El hilo conductor de la Jornada fue analizar los argumentos científicos de salud que relacionan el estilo de vida con la longevidad. El punto de partida fue la publicación de un artículo periodístico reciente que cuestionaba el valor de la alimentación en las personas centenarias de las blue zones, llegando a llamarlo en su titular poco afortunado ‘el mito de la dieta de los centenarios en las zonas azules’.
En cambio, las reflexiones en torno a la evidencia que ofrecen los estudios sobre estas zonas azules, destacan la importancia de la alimentación como un factor prevención de enfermedades, de promoción y protección de la salud, así como un factor de longevidad. Así mismo, no se puede desligar la alimentación de otros aspectos del estilo de vida, como los citados anteriormente en la comparativa entre las comunidades de Loma Linda, Cerdeña y Okinawa.
Aprendizaje constante
Más que conclusiones rotundas, durante la Jornada se plantearon preguntas que animan a seguir cuestionando e investigando con esa inquietud científica de quien desea seguir aprendiendo.
Agradecemos a todos los participantes por haber formado parte y haber hecho posible este evento; y deseamos que, con la ayuda de nuestro Gran Médico, podamos repetir en más ocasiones y con nuevas temáticas.
Autora: Sarai de la Fuente y Jonatán Bosqued. Redactora y director del curso Misión España – Jóvenes que cambiaron su mundo.