Ana y Elías se casan en Logroño

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La boda religiosa entre Ana Martínez y Elías Polo tuvo lugar en la iglesia adventista de Logroño el domingo 27 de febrero a las 12:00 horas. 

El templo estaba decorado exquisitamente. Había un arco de flores en la plataforma y una alfombra roja por donde caminarían el pastor, el cortejo nupcial y los novios. Si, daban ganas de casarse, o de casarse otra vez, y eso que aún no había comenzado la boda.

Los invitados estaban presentes, el aforo de la iglesia estaba completo. Además más de 40 personas conectaron vía Zoom desde Barranquilla, Colombia. A las 6 de la mañana hora colombiana, se habían preparado para participar de la ceremonia religiosa de su gran amigo Elías Polo.

Elías caminó hacía el altar acompañado de su madrina Herialet visiblemente emocionado, pero a la vez con la confianza absoluta de que estaba tomando la mejor decisión de su vida.  Cuando entró la novia al templo, todos los invitados se pusieron de pie para presenciar el desfile de Ana. Estaba vestida de blanco con un ramo de flores en sus manos y acompañada de su padrino Favio.

Ana caminó hacia el altar con una dulce sonrisa dibujada en su rostro que reflejaba la tranquilidad y seguridad de que su decisión era para vida eterna.

Elías recibió a Ana en la alfombra roja y juntos caminaron hacía el altar pasando por debajo del arco de flores para sentarse y compartir juntos el momento que uniría sus vidas con la bendición de Dios.

El primero piropo bíblico

En la homilía nupcial, el pastor Gabriel Villarreal felicitó a los novios por haber tomado el tiempo para hacer el curso prematrimonial, sin prisas, buscando construir un hogar no solo para esta tierra sino también para la eternidad.  El pastor hizo referencia al primer piropo que se encuentra en la Biblia: “Hueso de mis huesos y carne de mi carne”.   (Gen. 2:23). Estas palabras fueron pronunciadas por Adán a Eva agradeciendo a Dios porque le había provisto de una compañera para toda su vida.  Se animó a los novios a colocar a Jesucristo como el fundamento de su hogar.  Al finalizar la homilía se invitó a Ana y Elías para que su hogar fuera un “pedacito de cielo aquí en la tierra”.

Uno de los momentos más emocionantes de la boda religiosa fue el discurso de los novios.  Mirándose fijamente y con lágrimas que caían sobre sus mejillas, cada uno expresó desde el fondo de su corazón lo que sentía por el otro.  Las palabras expresadas contenían, amor, bondad, alegría, ternura, sacrificio, paciencia, compromiso y adoración a Dios.  Al final del discurso, los novios agradecieron a sus familias y amigos por haberlos acompañado en este tramo de sus vidas.  ¡Ahora si que daban ganas de casarse otra vez!

Los esposos Polo Martínez

Después de la oración pastoral por los novios, y la presentación de los esposos Polo Martínez a los presentes, llegó el momento más esperado por todos: “Se pueden besar”. Fue su primer beso como marido y mujer confirmando públicamente su amor y su compromiso matrimonial ante Dios.

La boda religiosa terminó con una sesión de fotos con los invitados donde cada familia tuvo la oportunidad de mostrar su aprecio y cariño a los esposos Polo Martínez.  El banquete se realizó en el restaurante La Grajera donde disfrutamos de una buena comida, la compañía de amigos y familiares y la celebración de esta preciosa boda.

Agradecimientos

Agradecimientos:  Quiero aprovechar la oportunidad para agradecer enormemente a Julvia Solis, Angélica Sánchez, Carlos Suarez, Favio Hayhua, Patricio Noco y otros miembros de la iglesia de Logroño que con su tiempo y esfuerzo trabajaron para que esta ceremonia fuera todo un éxito.

Autor: Gabriel Villarreal Escobar, pastor de las iglesias de Logroño, Calahorra y Soria
Imágenes: Rodríguez Fotógrafo