Las olas de la playa de Loredo (Cantabria) fueron testigos de un evento que trasciende el deporte. Del 1 al 5 de septiembre, este enclave cántabro se convirtió en el escenario del 26.º Encuentro Azul de Surf, una cita que, desde sus inicios, ha buscado ofrecer a los jóvenes una experiencia transformadora y que, una vez más, ha cumplido su objetivo.
Lo que comenzó en 1999 como la aventura de un grupo de apasionados del surf —entre ellos, Luis David— ha echado raíces profundas con el paso de los años. Tras un tiempo de pausa, el Departamento de Juventud Adventista de España (JAE) recuperó la iniciativa en 2021, dando paso a una segunda edición que sentó las bases para el encuentro de este año.
En esta 26.ª edición, la convocatoria reunió a 33 jóvenes de entre 18 y 35 años. 28 llegados de distintos puntos de España, junto a 4 participantes de Alemania y 1 de Bélgica. Todos compartían un mismo propósito: «vivir una experiencia única, acercarse a Jesús, disfrutar del compañerismo y contemplar la creación de Dios». Para algunos, fue el primer contacto con una tabla de surf; para otros, una oportunidad de perfeccionar su técnica y compartir su pasión. Sin importar el nivel, el ambiente de aprendizaje, diversión y apoyo mutuo fue el verdadero protagonista.
Mucho más que surf
Pero el Encuentro Azul es mucho más que surf. En la serenidad de la costa se abrieron espacios de reflexión y crecimiento espiritual. El pastor Narcis Dragomir guio a los jóvenes en un recorrido por la vida de Jonás, animándolos a profundizar en su relación con Jesús. La inmensidad del océano y la belleza natural del entorno se convirtieron en un recordatorio palpable del amor y el poder de Dios, creando un marco ideal para fortalecer la fe y cultivar amistades duraderas.
Los participantes coincidieron en que el encuentro no fue solo un evento, sino «una aventura en sí misma». Entre olas, risas y momentos de oración, descubrieron que la auténtica aventura es seguir a Jesús. Encontraron en la naturaleza y en la comunidad un camino hacia lo divino.
El Encuentro Azul de Loredo es, sin duda, un testimonio de que la fe, como una ola, puede mover montañas y llevar a los jóvenes a horizontes de crecimiento inesperados.
Autor e imágenes: Mykhaylo Kulishenko, pastor de la Iglesia Adventista del Séptimo Día en España.