El 20 de julio, la Iglesia Adventista de Reus celebró una emotiva fiesta de despedida para su actual pastor, Juan Carlos Peñalver y su esposa Elisa Gómez. Como muchas otras familias pastorales, después del verano servirán en una nueva iglesia. Su dedicación y trabajo constante ha sido una bendición para las congregaciones de Reus, Igualada, Tarragona y Manresa
El apóstol Pablo compara nuestra carrera vital con una disciplina deportiva. Y así es. En la vida de cada uno de nosotros, desde que empezamos a vivir hasta que dejamos de hacerlo, vamos superando etapas distintas, retos diferentes, aprendizajes nuevos, que nos hacen madurar y engrandecen nuestro conocimiento y calidad humana.
En el caso de la iglesia ocurre lo mismo. Como grupo humano vamos ascendiendo en nuestro conocimiento espiritual y fraternal hasta conseguir que todo el edificio esté bien construido. Para ello la figura del pastor es necesaria. Su trabajo es coordinar esfuerzos, orientar tendencias, sostener espíritus, equilibrar relaciones y velar para que el edificio se vaya construyendo sobre la base de la Piedra fundamental.
Despedida de nuestro pastor
Cuando llega un pastor nuevo a la congregación llega una bocanada de aire fresco para animar a los miembros. Cuando se va, deja tras de sí el perfume sacerdotal de olor agradable a Jehová impartido a cada uno de los miembros de la congregación.
Este es el caso del pastor Juan Carlos Peñalver, que nos ha acompañado y guiado estos últimos 6 años a la iglesia de Reus. Su dedicación y trabajo constante ha sido una bendición para las congregaciones de Reus, Igualada, Tarragona y Manresa, en las que ha servido junto con su esposa Elisa Gómez.
Aunque su traslado no será oficial hasta finales de agosto, este pasado sábado 20 de julio hemos procedido a realizar la despedida «oficial» por parte de la congregación. Tuvimos santa cena, palabras de despedida y por la tarde una merienda en tono informal donde los responsables de los departamentos y los miembros particulares tuvimos oportunidad de agradecer la labor realizada en nuestro favor y escribir nuestros buenos deseos y oraciones en globos que ascendieron al cielo como símbolo de petición y agradecimiento al Señor.
Desde estas líneas deseamos poner de manifiesto el agradecimiento de las iglesias que ha estado pastoreando en esta zona y desear que su labor pueda seguir con el mismo éxito en su nuevo destino.
Juan Carlos y Elisa, Que Dios os bendiga y os guarde, haga resplandecer su rostro sobre vosotros, tenga de vosotros misericordia, alce sobre vosotros su rostro y ponga en vosotros paz.
Autor: Jordi Abad, corresponsal de Revista Adventista de España en la Iglesia Adventista del Séptimo Día en Reus.
