 El sábado 18 de octubre, con un templo a rebosar debido a la visita de otras iglesias del distrito, la congregación de Terrassa celebró su 50º aniversario con música, un culto especial dirigido por el pastor Xavier Francés y una comida comunitaria.
El sábado 18 de octubre, con un templo a rebosar debido a la visita de otras iglesias del distrito, la congregación de Terrassa celebró su 50º aniversario con música, un culto especial dirigido por el pastor Xavier Francés y una comida comunitaria.
La jornada sirvió para compartir recuerdos con los miembros más veteranos y expresar gratitud por la protección y bendición de Dios durante cinco décadas. Como destacó la congregación, «Dios ha sido fiel a lo largo del camino».
Una historia que comenzó en 1903
La historia de la Iglesia Adventista del Séptimo Día en Terrassa se remonta a 1903, cuando los hermanos Frank y Walter Bond llegaron a España desde Estados Unidos como misioneros evangelizadores.
En Sabadell comenzaron abriendo una escuelita y una sala de reuniones, logrando sus primeros bautismos en 1904 y formando un grupo de hermanos en 1905.
Con la misión de evangelizar la comarca del Vallés, contactaron años más tarde con la familia Elías Gelabert, quienes dispusieron su hogar para hospedar a colportores encargados de difundir el evangelio en la zona. Entre los primeros bautizados se encontraba Noemí Elías, el 1 de noviembre de 1935.
Superando la adversidad y consolidación de la iglesia
Durante la Guerra Civil, el grupo se disolvió, aunque la fe se mantuvo viva. En 1968, gracias a la Ley de Libertad Religiosa, parte de la vivienda de Noemí se habilitó para reuniones de un pequeño grupo de unos siete miembros, atendidos por la iglesia de Urgell.
En 1974 se alquiló una casa con el compromiso de destinarla a iglesia, y con la colaboración de hermanos de Terrassa que asistían a la iglesia de Guinardó, se alcanzó el mínimo de 25 miembros requerido para oficializar la iglesia de Terrassa, inaugurada en 1975. El 26 de octubre de ese mismo año se firmó la primera acta oficial del grupo.
Cinco décadas de servicio y compromiso
A lo largo de estos cincuenta años, la congregación ha sido testigo de innumerables historias de dedicación, servicio y amor. Ha mantenido un compromiso constante con la fidelidad a sus principios y con la construcción de un entorno de esperanza y solidaridad, a través de programas comunitarios, actividades educativas y eventos espirituales.
La iglesia ha fortalecido la cohesión de la comunidad local, fomentando valores de solidaridad, respeto y responsabilidad social, consolidándose como un pilar de Terrassa.
Mirando hacia el futuro
La iglesia continúa planificando nuevas iniciativas, adaptándose a los cambios de la sociedad moderna y manteniendo su misión de ser un faro de fe y esperanza.
La continuidad de la misión iniciada por sus pioneros sigue siendo un símbolo de esperanza, amor y guía para todos los que buscan un camino de luz y propósito.
Autor: Francisco Chía, corresponsal de revista.adventista.es de la Iglesia Adventista del Séptimo Día en Terrassa.

 
				 
					
















